Pablo Varela

Tal como adelantó PERFIL, está todo dado para que el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, tenga como compañero de fórmula a Florencio Randazzo. Con dicho binomio, el mandatario cordobés buscará dar pelea en la escena nacional y colocar en la grilla de presidenciables una propuesta “antigrieta” que represente al interior productivo. Con dificultades para armar listas en todos los distritos, el frente Hacemos por Nuestro País tendrá candidatos a priori en 18 provincias. Se enfocarán, claro, en las más grandes y en las de mayor peso electoral.

Por caso, quien encabezará la lista de diputados en Córdoba, el distrito donde Schiaretti requiere un contundente triunfo, es Carlos Gutiérrez, actual diputado y un hombre clave en la estructura de campaña. Además, una voz schiarettista en el Congreso.

En la provincia de Buenos Aires, en donde votan cuatro de cada diez electores de todo el país, habría boleta corta. Es decir, una boleta que solo lleve candidaturas nacionales por lo que Schiaretti no tendrá candidato a gobernador en PBA ni despliegue territorial en los 135 municipios. La lista de diputados podría estar encabezada por Hilda “Chiche” Duhalde, o bien por el jefe de campaña, Diego Bossio. Todavía no hay definiciones. La aparición del nombre de Duhalde generó fricciones en el armado bonaerense y las dudas se prolongan.

Días atrás se especuló con la posibilidad de que Alejandro “Topo” Rodríguez se haga cargo de la candidatura por la senaduría en la provincia de Buenos Aires, pero en las últimas horas dicha posibilidad se enfrió.

Schiaretti desdobla su agenda entre el cierre de listas nacionales y elección en Córdoba, su verdadera base de operaciones. Este domingo habrá elecciones y el favorito es el intendente de la capital, Martín Llaryora, que lleva como vice a una intendenta radical, Myrian Prunotto. El armado local de Schiaretti busca ser lo más amplio posible y ha sumado a sectores de la UCR, a dirigentes del PRO, al GEN, al socialismo y a otros partidos locales.

En el comando de Schiaretti sostienen que las idas y vueltas con Juntos por el Cambio no han afectado al candidato del oficialismo local y esperan poder revalidar en una elección que se avizora competitiva frente a Luis Juez.

La alianza que llevará la candidatura de Schiaretti está integrada por distintos partidos, como el Partido Socialista, el Partido Autonomista y la Democracia Cristiana además de otros. El Gringo acelerará sus movimientos a nivel nacional una vez pasado el test cordobés en donde será clave un sólido triunfo para sus aspiraciones presidenciales.