Será desde este fin de semana y por tres meses, ya que harán varias obras. Pero como sólo hay colectivos hasta las 22.30, muchos pasajeros no saben qué hacer.
Viajar entre la Capital Federal y el Oeste del Conurbano bonaerense sumará otra complicación. El ferrocarril Sarmiento dejará de funcionar los domingos desde pasado mañana y al menos por tres meses, por obras de mejoras en sus instalaciones. Si a esto se le suma la falta de colectivos, sobre todo de noche, miles de personas tendrán serias dificultades para transportarse.
Para compensar la falta de trenes, el Gobierno nacional ofrecerá un servicio de colectivos que unirá las cabeceras de Once y Moreno parando en todas las estaciones intermedias. Funcionará de 6 a 22.30 (el último desde Moreno saldrá a las 21.30). Costará $ 3 y se podrá pagar con la tarjeta SUBE.
Pero el problema lo tendrán quienes deban viajar más tarde, por ejemplo los empleados gastronómicos. Es que entre la salida del último colectivo y el primer tren del lunes, que sale a las 4.56, no hay transportes disponibles.
Tampoco son alternativas las líneas de colectivos comunes. La línea 1 sólo corre entre Primera Junta y Morón; mientras que las 136 y 163, que llegan a Ituzaingó, no están circulando de noche desde hace meses por falta de unidades. La empresa que las controla, Ecotrans, pertenece a los hermanos Claudio y Mario Cirigliano, también propietarios de TBA, la ex concesionaria del Sarmiento.
Durante los domingos, el Sarmiento transporta a unas 21.900 personas. La gente ya empieza a pensar cómo resolver este problema. “Fin de semana de por medio trabajo como sereno, no puedo faltar todos los domingos. Voy a tener que usar algún colectivo que por lo menos me acerque, o tomarme alguna combi pero no se cuáles son los horarios”, comentó Angel Guerrero, un frecuente pasajero del Sarmiento. “Trabajo en Palermo y de alguna forma tengo que llegar a mi casa. No sé cómo voy a hacer. Uso el tren porque me lleva menos tiempo llegar a mi casa, con el colectivo termino llegando mucho más tarde”, agregó otro usuario, Mariano Torres.
Los inconvenientes para viajar comenzaron el 29 de julio de 2012, seis meses después de la tragedia de Once. Tras rescindirle el contrato a TBA, el Gobierno cerró el Sarmiento durante la noche y los domingos, para hacer mejoras en las vías. Aunque iba a ser sólo por 60 días, se demoró hasta fines de febrero de 2013. El tema es que el servicio nocturno nunca volvió, y tampoco siguieron los colectivos.
Ante este problema, un grupo de pasajeros que se vincularon a través del Facebook “Usuarios Organizados del Sarmiento” juntaron 7.000 firmas en las estaciones del ferrocarril para pedir servicios nocturnos, y se las llevaron a la Sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (SOFSE), la empresa estatal que controla el tren, pero la respuesta fue negativa.
En el Gobierno explican que la decisión de parar el tren los domingos obedece a que harán más de 100 obras simultáneas en la línea y no se las puede realizar con el servicio funcionando. Entre otras cosas, renovarán cables y construirán subestaciones eléctricas, instalarán el sistema de detención automática de las formaciones y también un nuevo sistema de comunicaciones; y ampliarán los andenes de las estaciones Ciudadela, Castelar y Ramos Mejía.
Luego de algunas obras de mantenimiento tras la tragedia de Once, el Gobierno compró 25 formaciones nuevas en China, y en julio pasado pudo poner en marcha las primeras seis, hasta terminar progresivamente de renovar la flota por completo. También lanzó un plan para remodelar las estaciones (la de Villa Luro ya está terminada). Pero algunos inconvenientes continuaron: entre el 30 de diciembre y fines de enero, por ejemplo, hubo cuatro descarrilamientos. Según los delegados, se debe a que los cambios de vías están obsoletos. En el Ministerio de Transporte, en cambio, acusan a algunos gremialistas de sabotear el servicio.
El cierre de los domingos provocará dentro de poco una situación particular: el tren no funcionará el domingo 22 de febrero, cuando se cumplan tres años de la tragedia de Once. Familiares de víctimas y sobrevivientes pidieron que ese día el servicio funcione, para poder ir a un acto que se hará en Plaza de Mayo.
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