Por Pablo Lapuente

 Jorge Macri tiene muy en claro dos cosas: mantendrá su candidatura a jefe de gobierno de la Ciudad, incluso aunque Horacio Rodríguez Larreta decida respaldar de manera explícita a otro dirigente del partido amarillo, y es prescindente en la pelea entre Diego Santilli y Cristian Ritondo por convertirse en candidato a gobernador de Buenos Aires. Para lo segundo, pone huevos en ambas canastas y envía a los principales dirigentes que le responden a actos y encuentros de ambos postulantes.

El armado político del primo del expresidente tiene base en el conurbano bonaerense, aunque también un volumen considerable en el interior. Quienes conocen en detalle este mapa enumeran a 110 dirigentes repartidos en los 135 distritos, muchos de ellos con cargos legislativos en el ámbito nacional, provincial y locales y varios otros con mucho menos protagonismo, pero también dispuestos a competir en internas el próximo año.

De este total, algunos de los jefes comunales del jorgemacrismo suelen inclinarse por la figura del Colorado; de hecho, reciben al candidato de Larreta en sus distritos, comparten agendas conjuntas y cruzan elogios en clave electoral, mientras que la gran mayoría, incluido el círculo íntimo del ministro porteño, prefiere a Ritondo, no sólo porque le reconocen el gesto de apoyo explícito que no tiene Santilli, sino también porque destacan que comparten varios años de trabajo conjunto, en el que la sintonía política y la agenda que manejan es prácticamente la misma.  

Entre el ejército a disposición que tiene el intendente de Vicente López en uso de licencia se puede contar a los intendentes Pablo Petrecca (Junín), Javier Martínez (Pergamino) y Mariano Barroso (9 de Julio); al diputado Waldo Wolff, la diputada María Sotolano; el presidente del bloque de Juntos en el Senado bonaerense, Christian Gribaudo; sus pares Verónica Barbieri y Mauricio Vivani; y dos de sus principales hombres de confianza que lo siguen en la gestión del Ministerio de Gobierno: César Torres y Gabino Tapia. Mención aparte merece la jefa comunal que lo sucedió en el cargo, Soledad Martínez, quien será candidata para quedarse al mando de Vicente López y, posiblemente, postulante a la presidencia del PRO el año próximo.

Entre los referentes que no gobiernan sus distritos se destacan David Zencich, en Merlo; Leonardo Cóppola, en Moreno, y Anabel Arboleda, en Marcos Paz. Si bien tienen pensado competir en municipios en los que el larretismo bonaerense ya tiene sus propios candidatos, participarán de una próxima reunión privada que Santilli está organizando para hacer un balance de año y proyectar la estrategia de la campaña. De ahí que el armado del jorgemacrismo esté repartido 50 y 50 entre los dos diputados que buscan suceder a Axel Kicillof en el sillón de Dardo Rocha. 

En el entorno del ministro reconocen la buena sintonía con toda la línea del ala dura del partido, desde Mauricio Macri y Patricia Bullrich en el ámbito nacional, hasta Ritondo, en el bonaerense, pero insisten en que “aún falta mucho para dar definiciones”. De ahí que hasta ahora no se haya expresado en favor de ninguno e incluso busque llevar a los distintos candidatos en su boleta, si es que, finalmente, persiste la estrategia de la Y, interna mediante. “Lo que sí está claro es que el armado de Jorge Macri es el más importante en la provincia después del de Ritondo, por eso será determinante en cualquier contienda electoral”, remarca con entusiasmo un hombre que sigue sus pasos con detenimiento.