Santiago Laurent llegó casi puntual. Apenas pasadas las 11, entró a su despacho del primer piso del palacio municipal, adornado con cuadros de San Martín, Néstor Kircner y el Indio Solari. Una trinidad pagana y popular cuya veneración comparte con muchos peronistas de su generación. 

Vestía jeans, zapatillas y un buzo azul con cierre. El primer candidato a concejal del Frente de Todos y secretario de Gobierno municipal no usa camisa. O casi nunca la usa. Ni siquiera para los actos protocolares o las fotos de campaña que adornan la Panamericana en tamaño gigante y que todavía no se acostumbra del todo a ver cada vez que pasa. 

“Ese soy yo, como se ve en la foto”, se justifica cuando algún asesor le reprocha la informalidad. También en la entrevista esquivó los formalismos y (casi todos) los clichés de la campaña. Aceptó, en cambio, zambullirse en una agenda de fondo. Sobre todo, en el perfil industrial que plantea, junto al intendente Federico Achával, como el que predominará en el Pilar que viene. “La industria es lo que genera puestos de trabajo para los pilarenses”, dijo. 

Las obras que viene desarrollando el gobierno incluso en el contexto de la pandemia, los planes para el día después, la relación con la clase media y los vaticinios electorales también fueron parte de la charla. 

- ¿Cómo se plantea la agenda cuando la pandemia ya no sea un elemento condicionante?

- En un contexto de pandemia, de tantas restricciones de todo tipo pero principalmente presupuestarias, hemos logrado dar el puntapié inicial a transformaciones históricas, que eran anhelos de décadas, como el Hospital Central o el proyecto de universidad.

Si en ese contexto se pudo iniciar un proceso de transformación tan grande que en otros momentos políticos, como el de Cambiemos y la derecha, nos planteaban que eran imposibles, tenemos que seguir el mismo rumbo. Nuestro horizonte político es siempre el mismo: el de reducir las desigualdades que tiene Pilar. Después de cuatro años de liberalismo, de ajuste, endeudamiento, pérdida del laburo, poner Pilar de pie es recuperar la economía, pero definitivamente es tener un Estado presente. 

- ¿A qué se refieren cuando hablan de un Estado Presente? 

- Es un Estado que se hace presente donde más es más necesario, que es en nuestros barrios más retrasados. Hablamos del caso de Lagomarsino, que es simbólico porque ha sido históricamente la localidad más olvidada de Pilar y fue la que más sufrió los cuatro años de del macrismo. Por eso fue prioridad en nuestro primer año de gobierno: el nuevo club municipal, las obras de asfalto, las luminarias, un jardín de infantes, tres salas salud. Lagomarsino es el modelo de gestión que tenemos que llevar a cada uno de nuestros barrios más postergados. A lo que apostamos es a profundizar ese cambio estructural.

- ¿Y cuál es la línea del cambio estructural qua planifican para Pilar?

- En primer lugar, tener nuestros barrios postergados con infraestructura, asfaltos, instituciones, la recuperación del espacio público. Y el proyecto estratégico es la Universidad Nacional de Pilar. Primero desde lo simbólico, por el orgullo de haber sido quienes defendimos el predio del Pellegrini cuando la derecha y el macrismo quisieron venderlo. Hoy estamos avanzando en ese proyecto que en el muy corto plazo será ley nacional y nos permitirá tener una universidad pública y gratuita para que los hijos de Pilar ya no tengan que viajar para estudiar y formarse. Pero además viene a aportar lo que nos está faltando. Tenemos que asumir que el futuro de Pilar es industrial, porque la industria es lo que genera puestos de trabajo para los pilarenses. Y ahí la universidad es clave.

- ¿Cuál es el rol de la universidad en el modelo industrial?

- En la gran transformación que nos que nos falta en el Parque Industrial para que cada vez que haya un puesto de laburo que cubrir se haga con gente de Pilar. Esta Universidad Nacional está pensada en un perfil técnico industrial y viene a aportar a la demanda que tiene la industria. No es no es un proyecto universitario pensado en un laboratorio, está pensado en concreto para lo que necesita Pilar. Une las dos patas: la necesidad de justicia social y generar fuente de trabajo con el desarrollo industrial que buscamos. Es la apuesta estratégica más importante que tenemos cómo gestión.

- Pilar ya tiene un perfil industrial pero convive, y a veces compite, con un perfil urbanístico. ¿Hacia adelante debe consolidarse lo industrial por encima de lo inmobiliario o hay lugar para un desarrollo paralelo?

- Obviamente Pilar ha ganado su valor del urbanístico por la ubicación estratégica y hay que seguir aportando a ese sector. Pero si hay una oportunidad para el desarrollo de Pilar es del sector industrial. Pasada la pandemia, hay una cantidad enorme de proyectos de inversión en el sector que es el que nos va a traer realmente puestos de laburo. Hay que hacerlo con el acompañamiento del Estado, pero es necesario que ese desarrollo industrial traiga beneficios a nuestra comunidad. Si es un desarrollo industrial que está desacoplado de la realidad de Pilar no sirve para nada. 

- ¿Y cómo se acopla ese desarrollo industrial con el desarrollo comunitario?

- Con Federico, cuando visitamos una industria hablamos con un gerente de recursos humanos y le planteamos que queremos que conozca cómo es el centro de salud donde se atienden sus laburantes, cómo están las escuelas dónde van los hijos de sus laburantes. Apostamos a un modelo de comunidad real. Ahora no es el verso que escuchamos en años anteriores de supuesto acompañado a la industria, cuando en realidad tomaron las medidas que la deterioraban.

- ¿Hay políticas activas del Municipio para fomentar ese desarrollo industrial? 

- A los empresarios, como a los vecinos, le gusta ver en el Estado gente seria y comprometida. Es lo que les genera tranquilidad.

En nuestro proyecto político están viendo eso: que el aporte que hacen de recursos con el pago de tasas vuele en obras. Todo el sector industrial sabe que lo que está aportando fue trascendental para la lucha para la pandemia. Se sienten parte. Han aportado para que seamos el municipio que más testeos hizo en la provincia de Buenos Aires, que seamos uno de los municipios que más avanzamos en la campaña de vacunación, que vamos a construir el hospital central. Saben por sus trabajadores que las obras de infraestructura llegan a sus barrios, que en muchísimos hemos renovado la sala de atención primaria, que es la primera vez que se intervino la totalidad de las escuelas públicas, que se están calefaccionando las aulas.

Además, en plena pandemia logramos sostener un parque industrial que funcionó al 70% de su producción normal. Y ni en una sola empresa se generalizó un contagio a toda la planta. Eso, como proyecto político nos dio mucha legitimidad.

- ¿Ven la misma legitimidad hacia la ciudadanía o hay cierta apatía?

- Estamos en un momento muy difícil. Cuando pasen los años vamos a tomar dimensión del momento que vivimos. Para muchos implicó una caída en el nivel económico, pérdida de laburo, golpes emocionales muy fuertes y para algunos pérdidas de seres queridos. Venimos de un proceso traumático y eso flota una en el aire. Lo que sí percibimos es un reconocimiento de que en esos momentos difíciles hubo un Estado y un proyecto político que acompañó a las familias. No hemos escuchado una sola crítica de que no estuvimos presentes en los momentos más difíciles haciendo todo lo posible para acompañar al necesitó una mano. 

- ¿Esa relación es la misma con los sectores medios?

- Nosotros tenemos un compromiso muy fuerte con los sectores más vulnerables. A poco de asumir nos tocó también administrar la pandemia y lo hicimos sin distinciones, creando un sistema para todos. Cualquier pilarense que lo necesitó se pudo testear y tener resultados rápido, recibir asistencia incluso mejor lo que pudo haber hecho el sector privado. Muchísimos pilarenses que tienen el privilegio de tener una prepaga optaron para atenderse en el sistema público. También tenemos un compromiso muy fuerte con el sector comercial, una vuelta de página del proyecto de Cambiemos que se puso de manifiesto con el código urbano. Planteamos un esfuerzo de intervención del Estado sobre los centros urbanos. Está claro que si dejamos al mercado por sí mismo, el corredor

Panamericana es más atractivo. Nosotros iniciamos con dos obras centrales: el parque de estación Toro, en Derqui, y el paseo del centro en Pilar. A ese sector comercial medio o pequeño lo acompañamos también con el programa comercios cuidados, en el que también hay una decisión de pedirles a los sectores que habían ganado durante la pandemia -supermercados y bancos- una contribución mayor para ayudar al pequeño comerciante.

“Nuestro horizonte político es siempre el mismo: el de reducir las desigualdades que tiene Pilar”.

“Trabajamos para tener nuestros barrios con infraestructura, asfaltos, instituciones y recuperar

el espacio público. Pero el proyecto estratégico es la Universidad Nacional de Pilar”.

“Ahora no es el verso que escuchamos en años anteriores de supuesto acompañamiento a

la industria, cuando en realidad tomaron las medidas que la deterioraban”.

“Nuestro compromiso con el sector comercial es una vuelta de página del proyecto

de Cambiemos. Apostamos con obras a los centros urbanos de las localidades”.

ELECCIONES

“Pilar se siente mejor representada en el camino del peronismo”

- ¿Es tu cuarta campaña, qué cambia respecto a las anteriores?

- La principal diferencia es que en esta instancia somos parte del proyecto político que está gobernando Pilar en un contexto muy particular que es el de la pandemia. Es una campaña en la que estamos mostrando lo que hicimos en este año y medio de gestión.

En 2019 asumimos un compromiso desde el Frente de Todos a nivel nacional provincial y con Federico Achával en Pilar. Ese compromiso está en pie, lo estamos cumpliendo y está transformando Pilar. Es también convocar a los pilarenses a que profundicemos este proceso de cambio que estamos llevando adelante.

- El otro día, hablándoles a los jóvenes, los llamaste a dar una paliza electoral. ¿Están confiados en el resultado?

- El tiempo me enseñó a nunca estar confiado. Cuando menciono eso de la paliza electoral me refiero a que estamos ante una oportunidad de generar un consenso mayoritario al rumbo que queremos para el país, la provincia y Pilar. Hemos logrado transformaciones importantes. Lo que tenemos que demostrar con el resultado electoral es que Pilar decididamente acompaña y se siente mejor representada cuando está en el camino del peronismo, el Frente de Todos, cuando se siente parte del proyecto de Alberto Fernández, del proyecto de fundaron Néstor y Cristina, de la provincia que gobierna Axel Kicillof, del Pilar de Federico Achával, del espacio de Máximo. Estamos ante la opción de entender que no tenemos que volver nunca más para atrás a los años del macrismo y el vidalismo porque nunca sufrió tanto Pilar como en esos años. También el otro día en el apelé a lo que dijo Cristina, que no hay crisis que no se pueda revertir a través de la política. Argentina es un ejemplo de que nos hemos levantado una y otra vez y de que desde el peronismo hemos reconstruido todas las veces que fue necesario tras los desastres que generó el liberalismo. Hoy estamos ante una instancia es decir no volvamos nunca más al liberalismo tengamos un mismo rumbo para para la Argentina y para Pilar.