El presidente se coloca siempre “en el centro” y ataca “con saña” a sus adversarios, sean reales o imaginados, logrando abrir heridas que se daban por cerradas, asegura. Le ayuda el hecho de que la oposición existente en el país no es verdaderamente fuerte.

En su editorial de este sábado 20 de marzo, titulado México Crispado, el diario, de gran peso internacional, analiza la estrategia política y mediática que el presidente ha desarrollado en los últimos meses, fundada en atacar sin tregua ni medida a diferentes sectores, propiciando un “clima de crispación nacional”, que le beneficia a él y a su partido, Morena, pero daña a México.

El presidente, dice, impulsó “una abrupta e inquietante reforma energética”, se confrontó con la judicatura y mostró una “resistencia patriarcal e interesada” en apoyar la candidatura de Félix Salgado Macedonio, lo cual lo llevó a confrontarse con el feminismo.

“De un jefe de Estado se espera una acción ponderada y una visión a largo plazo. Que las encuestas otorguen a López Obrador una popularidad elevada o vaticinen unos buenos resultados a su formación, Morena, no justifican la polarización permanente de la vida política. Agitar el árbol de la discordia, situarse en permanente centro del tablero, atacar sin pausa y con saña a los adversarios (reales o inventados) o abrir heridas que se daban por cerradas, podrá ayudar a recargar las baterías electorales, como se ha visto por desgracia en otros países, pero aleja a México de la senda de la concordia y recuperación que tanto necesita”.

El País también enfatizó en la ausencia de contrapesos reales que hagan frente a la estrategia del morenista.

Los partidos más fuertes, dice, están pagando por sus errores. El PRI, por la corrupción de décadas, y el PAN, por su “sangriento pasado”, esto, en alusión al sexenio de Felipe Calderón, en que se libró la llamada “guerra contra el narco” que dejó miles de muertos.

De esta manera, el diario se pronunció ante los cotidianos ataques e insultos que el presidente profiere en contra de toda clase de actores y sectores, como la prensa crítica, a la que llama “chayotera”, a la Auditoría Superior de la Federación, al juez Juan Pablo Gómez Fierro, Bimbo, Walmart, Femsa, Claudio X. González, el expresidente Felipe Calderón y muchos ejemplos más.

Al tiempo, AMLO defiende de manera abierta las acciones que benefician a su gobierno o sus simpatizantes, como por ejemplo el crédito de 150 millones de pesos que Bancomext concedió a su amigo y propagandista, el productor de televisión Epigmenio Ibarra.

También, la candidatura de Salgado Macedonio, de quien dijo que era una víctima de linchamiento y falsas acusaciones, al tiempo que al movimiento feminista lo acusó de estar manipulado por la derecha.