Tras nueve años de trabajos, que implicaron desde rediseños de puentes hasta salvatajes con aportes provinciales para reanudar obras cuando no llegaban los fondos de la Nación, se está llegando al final de la construcción de la principal obra vial del denominado Corredor Bioceánico, la ruta 150 que unirá la localidad de Ischigualasto en Valle Fértil con Huaco en Jáchal: en tres meses y medio quedará habilitada la ruta, según anticipó el gobernador Gioja y corroboraron ayer autoridades de Vialidad Nacional. ‘’Si Dios nos ayuda, la vamos a inaugurar en julio’’, dijo el mandatario provincial, quien recordó que se ha hecho ‘’una inversión millonaria no para dar la vuelta turística, sino para completar el corredor bioceánico’’. Es que esta nueva traza de 113 kilómetros que nació en el medio de una difícil geografía de montañas y precipicios es la última que falta para unir por carretera la localidad brasileña de Porto Alegre, con el puerto de Coquimbo en Chile, pasando por el centro argentino y donde la pieza fundamental será el túnel de Agua Negra. ‘’En el próximo mes de julio vamos a habilitar el tránsito vehicular de la ruta 150. Si falta algún detalle, será menor, y tomaremos medidas de precaución, pero la idea es abrirla para esa fecha porque está todo dado para que los plazos se cumplan’’, dijo Rubén Lomas, el titular de Vialidad Nacional en la provincia. Agregó que hay un avance de obra ‘que supera el 90%’’. En la actualidad, prácticamente el 100% del concreto asfáltico está colocado, ‘’sólo faltan pocos metros en la zona de los dos puentes colgantes y el túnel’’, dijo Lomas, y toda la ruta ya está señalizada. Además se terminó de levantar en altura al puente sobre el río Bermejo -que fue deteriorado por una creciente y debió rediseñarse- y en un mes se termina totalmente el terraplén y la pavimentación de la zona.

En cuanto a los dos puentes arcos -que no tiene pilotes para evitar el daño de crecientes- se están terminando los elementos prefabricados en fábrica y luego serán traslados a la zona de obra ‘para ser armados como un mecano’’, explicó el funcionario. Puede que al momento de habilitar la traza falten mallas de contención en zonas de precipicio -por demoras en la importación-, pero se tomarán medidas de precaución si eso ocurre. Lo que no se entregará con la obra es una de las dos casas de guardaparques en Ischigualasto. Lomas dijo que a pedido del Ministerio de Turismo y del parque se pidió una readecuación del proyecto de la vivienda para hacerla más grande. Esto es porque originalmente se pensó en un inmueble para albergar guardaparques, pero ahora se extenderá para alojar a investigadores.