La obra de reparación que comenzó el martes en el tramo San Pedro-Río Tala continúa luego de que el intendente, Cecilio Salazar, reclamara al Gerente de Regiones de Vialidad Nacional, Patricio García, de que "no se está haciendo el arreglo que se pidió". La Opinión recorrió la obra, donde personal realizaba parte del trabajo de forma manual por la avería de una máquina.
El martes comenzó una obra de reparación en la Ruta 1001, en el tramo que une San Pedro con Río Tala, por parte de Vialidad Nacional tras varios pedidos de la Municipalidad y fallos judiciales, motivados en que el pavimento, que hizo la empresa Iarsa en 2016, se deterioró rápidamente.
Sin embargo, el Gobierno se mostró disconforme con las tareas. "Para nada es bacheo profundo. Eso es un bacheo superficial. Bacheo profundo es levantar todo el paquete estructural donde está roto y llegar a la parte seca, ahí hacer un suelo cal bien compactado y ahí recién colocar el pavimento en caliente de 12 centímetros. Ya hablé el miércoles con Patricio García. Lo puse en conocimiento que la tarea que están haciendo no es la adecuada. Ayer vino un inspector y verificó lo que le manifesté a García. Espero que lo resuelvan", señaló el Jefe Comunal a La Opinión.
Además, indicó que "el material que tienen no es suficiente para todo el trayecto" porque "de 1000 toneladas que se necesitan tienen solo 400 para el arreglo" y admitió que el director de Vialidad Nacional, Gustavo Arrieta, le prometió "solucionarlo".
Este sábado por la mañana, La Opinión recorrió las obras y dialogó con automovilistas que se encontraban esperando en los tramos donde el tránsito está siendo asistido. "Nosotros viajamos todos los días y hoy estoy acá de casualidad, porque no usamos más esta entrada. Siempre vamos por la otra. Es un peligro", aseguró un comisionista.
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