La ruleta rusa de Milei y el salvataje provisorio para el grupie de la extrema derecha

La ruleta rusa de Milei y el salvataje provisorio para el grupie de la extrema derecha

El operativo de emergencia para sostener al presidente después de la criptoestafa. Wall Street finge demencia y sigue en modo timba. El ajuste en los ingresos y el choque de LLA con Macri y AEA. El radicalismo se inmola por la extrema derecha y el peronismo, en el límite de la confrontación interna.

Por: Diego Genoud.

Mientras Javier Milei respire y reaccione, no hay dato ni prueba que pueda conmoverlos. Ante la repercusión internacional de la estafa que protagonizó el presidente argentino, las fuerzas que lo sostienen pusieron en marcha un costoso operativo de reducción de daños. Los fondos de inversión de Wall Street, Kristalina Georgieva, Donald Trump, Elon Musk y los ganadores del establishment local cerraron filas para lograr que el presidente salga con vida de la Operación Shitcoin. Tiene lógica: después de ver fracasar diferentes proyectos políticos en las últimas décadas, los actores que hoy controlan el poder no están dispuestos a entregar a un kamikaze que hace y dice todo lo que quieren.

El caso $Libra golpeó en el corazón de La Libertad Avanza porque Milei fue el artífice del engaño pero además porque quedaron expuestos y dañados dos actores centrales de su andamiaje de recaudación: la sociedad fraternal con Karina Milei y el esquema de negocios que conecta con el influencer de extrema derecha Agustín Laje. El grado de intimidad que la hermana presidencial y el líder de la Fundación Faro habían logrado con los intermediarios de la gran estafa los confirma como pilares del experimento Milei. Se actualizan en loop los testimonios que señalan a Karina como la encargada de cobrar el acceso a un panelista que ascendió como pedo de buzo. Una tarifa indexada a la enésima potencia en apenas dos años, mientras en Argentina los ingresos y jubilaciones caían en picada. Lujos propios de una nueva casta.  

Como prueba de que algo falló, Laje borró la foto que se había sacado en un partido de la NBA con los intermediarios Mauricio Novelli y Jeremías Walsh, en las horas previas al lanzamiento de la criptoestafa. Sin la exposición local del titiritero Santiago Caputo, pero con una incidencia muy superior en los foros de la alt-right global, el politólogo arrancó mal el año: fue el cerebro detrás del discurso que dio Milei en Davos y ahora quedó enredado en una trama delictiva que complica la guerra cultural que $Libra cada día. El autor de “Generación Idiota” es una criatura anfibia, capaz de tener cientos de miles de visualizaciones en Youtube y lograr al mismo tiempo que la liga de empresarios pro Milei pague 25 mil dólares para escucharlo hablar el lenguaje de la última dictadura en el Yacht Club de Puerto Madero.

La empresa de Milei está en problemas. Todo lo que invirtió el ex economista de Eduardo Eurnekian en instalar una performance global de repente se le vuelve en contra. Los medios mainstream de Occidente descubrieron que el outsider era en realidad un impostor nacido en el gran baldío del tecnocapitalismo. 

Si no lo estabilizan en el corto plazo, Hyden Davis puede ser la pieza que detone el andamiaje de poder de la hermandad. El cripto estafador estadounidense obliga a la SEC a seguir la ruta shitcoin y potencia la repercusión internacional. El representante de Kelsier Ventures es un hombre bomba. Habla de más, da señales ambiguas y no sé sabe a quién representa. Como si fuera un doble agente. En su regreso prematuro para vengarse del entorno presidencial, Mauricio Macri podría argumentar que se refería a gente como Davis cuando hablaba de un gobierno “fácilmente infiltrable”. ¿El cripto estafador quería lucrar con la franquicia de Milei o tenía la misión de hundirlo?

La gobernabilidad de Milei no depende de su actuación como groupie de Musk ni de las selfies con Georgieva. Son los fondos de Wall Street los que siguen sosteniendo el ajuste más grande de la historia: un sacrificio social que los tiene como principales beneficiados y pagan los argentinos de a pie. El último informe de la consultora Empiria muestra el reverso del superávit fiscal. 

El ingreso disponible de los hogares del AMBA, dice, cayó 18% en 2024 con respecto a 2023. Es lo que le queda a las familias después de pagar sus obligaciones fijas: gas, luz, agua, transporte y expensas. Pese a que en el segundo semestre del año pasado hubo un alivio, en diciembre el ingreso promedio disponible quedó 13% por debajo de los niveles de noviembre de 2023. El ajuste es desigual: mientras el grupo de hogares con mayores ingresos perdió 8,9% en relación a la inflación, el de menores ingresos sufrió una pérdida de 19%. La razón: la suba acumulada de 65,8% real en los gastos fijos durante 2024: el gasto en transporte aumentó 87,4%; en electricidad y gas, un 143%; en agua, un 97,5%; en expensas, un 39,7% y en alquileres, un 66,5%. 

El informe de la consultora de Hernán Lacunza dice que el resultado sería peor si se midiera el IPC con la canasta de la Encuesta Nacional de Gastos de Hogares de 2017-2018. Con esa medición, la inflación anual fue mayor (135% vs 118%) y el ingreso disponible tuvo una caída promedio del 21% en poco más de un año.

En otro mundo, ante el escándalo de $Libra, los grandes bancos de inversión no dejan de recomendarles a sus clientes que apuesten a la Argentina libertaria. JP Morgan, Bank of América y Goldman Sachs insisten en que LLA es lo mejor que les puede pasar. Solo Barclays advierte desde junio de 2024 que conviene estar a salvo del riesgo Milei. “Intuitivamente, el mercado va a tratar de olvidar y dejar el tema atrás. En todo caso, verá si la sociedad está tan anestesiada que sigue de largo, pero no le va a soltar la mano de entrada”, dice un argentino que trabaja en Nueva York desde hace 15 años. De acuerdo a su interpretación, Wall Street ya metabolizó que Milei tiene “cosas problemáticas”, pero mientras avance con sus leyes y nadie lo toque no va a perder apoyo.

Un economista con llegada a los fondos coincide en parte pero dice que Milei encendió la primera alerta en un ámbito que se siente hiperregulado y ve al mundo cripto como el far west postestatal. Para él, Milei rifó en unas horas la credibilidad que compró durante todo 2024 ante el poder financiero. “Los que habían encontrado una racionalidad a cosas delirantes ahora empiezan a dudar”, dice.

Imposible no especular con la pesadilla de que Milei sea, al final del panic show, un nuevo Macri. Por eso, los fondos de inversión deslizan un deseo para el año electoral: esperan que Luis Caputo les entregue un seguro de cambio para cubrirse de la devaluación. Un bono dual como el que ideó Sergio Massa o cualquier otra fórmula que les asegure ganar, pase lo que pase.

Peor es el impacto en la comunidad cripto que idolatraba al paleolibertario. Según los datos de la Fundación Blockchain que publicó El Destape, en Argentina los usuarios activos mensuales de billeteras cripto son 2,5 millones. Desde el 14F, muchos advierten a un líder desangelado. El presidente pasó de promover $Libra como forma de fondear pymes a decir que apostar ahí era como jugar a la ruleta rusa o el casino, la exacta metáfora que utilizó Davis en la entrevista que le concedió al youtuber Coffeezilla. Un casino no regulado, dijo.  

Macri no dudó en interrumpir sus vacaciones para insinuar por primera vez una crítica que excede a Caputo Jr y roza a El Jefe. La presencia de Santiago Siri en el grupo de sub 40 que lanzó el Nuevo PRO confirma que el ex presidente tiene elementos para fulminar a la gran hermana. Siri sostiene que el caso $Libra termina en la SEC y lo mismo piensa Darío Nieto, el secretario cripto de Macri. El ingeniero delató en público que se siente fortalecido cada vez que Milei se autodestruye. El mismo sentimiento experimentó Victoria Villarruel, aunque sin exhibir la euforia que vive como relevo del pobre jamoncito. 

La estafa global puso a prueba el sistema de lealtades de Milei y generó una atmósfera adversa como nunca. Por su propia esencia, la secta libertaria acumuló demasiados enemigos en poco tiempo. Lo particular es que Milei no retrocede, en una permanente fuga hacia adelante. En su peor momento, decidió ir a un triple conflicto. En pocos días, el presidente apuntó contra el Grupo Techint en el encuentro del BID en Washington, Lilia Lemoine señaló en televisión el interés de Clarín por Telefónica y el enviado de Caputo al Congreso destripó a Macri, el diario La Nación y el estudio Cassagne por “la lluvia de operaciones” en la licitación fallida de la Hidrovía. ¿Sabe lo que hace o sobrestima sus propias fuerzas?

La política sigue tomada por el delay. Eduardo “Peteco” Vischi trabajó para la sociedad fraternal a tiempo completo. Como delegado del gobernador de Corrientes Gustavo Valdés, el jefe de los senadores radicales fue una pieza decisiva en el operativo impunidad que diseñó la Casa Rosada en un momento de extrema debilidad. Vischi ejecutó una triple maniobra que liquidó la posibilidad de crear una comisión investigadora en el Senado.

Primero desactivó la jugada opositora que planteaba que, sin comisión, no habría sesión para tratar la suspensión de las PASO. Después, convenció al radicalismo colaboracionista de tratar sobre tablas el proyecto -que él mismo había firmado- para investigar la estafa. Y finalmente, en un salto olímpico, lideró un grupo de seis senadores que votaron contra la iniciativa que apuntaba a los Milei. La también correntina Gabriela Valenzuuela, la mendocina Mariana Juri, el santafesino Eduardo Galaretto, la entrerriana Stella Maris Olalla y el chaqueño Víctor Zimmermann se plegaron al salvataje. Junto a ellos votó el macrista Martín Goerling Lara, aquel que Macri y Villarruel imaginaron para presidir la Bicameral de Inteligencia.

Antes de la votación, Vischi hizo dos movimientos que dejaron en claro el grado de compromiso de la UCR ejecutiva con la extrema derecha. Primero mantuvo una reunión reservada en la presidencia de la Cámara con la task force de Milei, el libertario Ezequiel Atauche, el peronista Juan Carlos Romero y Carlos “Camau” Espinola, el Kueider sano. Más tarde, Vischi rompió con todo formalismo y decidió ir con Atauche a la reunión del bloque radical. “Ezequiel, tiene algo para proponerles”, dijo. El jefe de la bancada de los Milei quería postergar la comisión investigadora para dentro de 10 días con promesas difusas. Tras el operativo fallido, se diseñó la maniobra de emergencia: habilitar el tratamiento sobre tablas para, finalmente, liquidar el proyecto. A esa altura, la última jugada posible para salvar a Milei.

La oposición estuvo a un voto de lograr los dos tercios (48) necesarios para armar la comisión. Tan decisivos como los 23 senadores que votaron en contra, fueron Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, los dos misioneros que se ausentaron por orden del gobernador radical Hugo Passalacqua y su jefe político, el peronista Carlos Rovira.

El caso muestra el alineamiento sin fisuras de los gobernadores radicales, en esencial de dos, Valdés y Alfredo Cornejo, aquel que solía rebelarse ante Macri y hoy es un obediente alumno de Milei. Pichón de Valdés, el chaqueño Leandro Zdero  es el tercero y el cuarto es Maxi Pullaro, un camaleón que consolida su poder provincial sin chocar de frente con la ultraderecha. 

En el radicalismo actual afirman que los gobernadores viven asustados porque piensan que Milei va a ganar las elecciones de medio término y quieren asociarse con LLA. Difícil ecuación: los que debían investigar a Milei hacen cola para que Karina y sus soldados les atiendan el teléfono. 

El inviable Vischi enfrentó objeciones de la mitad de su bancada. A Pablo Blanco, autor del proyecto de comisión investigadora, se sumaron Maximiliano Abad, Martin Lousteau, el mendocino Rodolfo Suarez y Carolina Losada. Vischi les mintió a los miembros de su bloque y tuvo un cruce con Losada cuando pidió a los radicales que no dieran entrevistas en los medios sin avisarle. Losada le recriminó que durante seis meses le ocultó a su propio bloque la firma que le puso al dictamen del juez Lijo en agosto de 2024. “No lo conté porque no pensé que lo iban a filtrar”, respondió Vischi. Curiosa forma de justificarse.

A Milei lo salvaron los conversos de la casta, un sistema político en descomposición que primero le permitió escalar al poder en tiempo récord y ahora le resulta de lo más funcional. 

La suspensión de las PASO confirmó en el Senado la imagen que proyectó Diputados. Como un archipiélago sin dirección, el peronismo es una fuerza donde mandan las necesidades provinciales, no hay proyecto nacional y la derrota digna se volvió una costumbre. Con el lanzamiento del “Movimiento Derecho al Futuro” y el desdoblamiento de las elecciones, Axel Kicillof intentará ponerse al frente de la alternativa a Milei. En un año que puede ser bisagra, el gobernador del distrito más grande del país enfrentará un aluvión de dilemas políticos y de gestión. Entre ellos, está la relación con su histórica jefa política. A menos que se logre en algunas semanas lo que no se pudo en los últimos 15 meses, Kicillof arrancará su campaña desafiando la consigna que marcó una época: “Con Cristina no alcanza y sin Cristina no se puede”.

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