Los doctores Alejandro Armendáriz, Jorge Lenzi, Juan Carlos Greco, Verónica Greco y Alejandra Lordén fueron parte de esta reunión en la cual el Municipio solicitó información sobre la actual situación de la clínica y su inminente cierre.

“Nos angustia porque sabemos que es un servicio de salud muy necesario en Saladillo, y más en estos tiempos de pandemia. El intendente se puso a total disposición para realizar las gestiones que sean necesarias desde lo institucional pero también desde lo político para que no cierre la clínica y que los 37 trabajadores no se queden sin trabajo”, dijo.

Los directivos sostuvieron que esta situación económica viene desde hace años siendo arrastrada y hoy se enmarca en lo que está pasando con el sistema de salud a nivel nacional y provincial, no solo en lo económico sino también en la falta de profesionales formados. En ese sentido, señalaron que tienen dificultades para el pago de salarios al personal.

“Hoy no es rentable para una clínica privada en lo que ingresa como acompañamiento de honorarios y de las mutuales puntualmente, y lo que se debe efectivizar en mantenimiento y servicios”, dijo la funcionaria.

“Los directivos hace tiempo vienen evaluando que esta situación está afectando la calidad del servicio. No quieren que decaiga más. En la reunión hablaron de todas los encuentros y llamadas que realizaron para ver cómo alguien desde lo privado pueda hacerse cargo de la clínica y sacarla adelante”, agregó.

Rodríguez comentó que el intendente se comunicó con el Ministro de Salud de la Provincia para plantearle este problema y la contestación que tuvo fue que se comunicará con IOMA para acompañar a la clínica en este proceso. Aun así, la secretaria afirmó que “no hay nada alentador a la vista”, pero si comentaron en la reunión que existe un privado que se hizo cargo de sanatorios privados en el interior en situaciones similares y que se contactó con el directorio de la Clínica Saladillo, pero no hay expectativas todavía sobre un posible rescate.

Más allá de eso, Rodriguez remarcó que además del destino de los trabajadores de la clínica al Municipio le preocupa que el Hospital Posadas absorberá la demanda que hoy tiene el sanatorio, en un momento de expectante emergencia por la pandemia de Covid-19.