Pero también dejó en claro su postura ante el reclamo de gremios estatales: “Presupuestariamente no hay recursos para discutir aumentos con nadie, y tampoco para nosotros”.

La gobernadora Fabiana Ríos argumentó en la falta de recursos económicos la “decisión política” de suspender el incremento de sus haberes y los de los integrantes de la planta política de su Gobierno, resultante del aumento salarial otorgado por el intendente de Río Grande, Gustavo Melella, a los trabajadores de la Municipalidad del norte provincial.

Cabe recordar que mediante el decreto 1708/14, Ríos suspendió “los aumentos salariales otorgados a partir del 30 de junio del corriente año por los jefes municipales, para el cómputo de su haber y el de todo el gabinete del Ejecutivo provincial”. Al respecto, el ministro de Economía, Osvaldo Monti, había señalado que “se tomó la decisión de impedir que los aumentos otorgados por los Municipios impacten en la masa salarial del Ejecutivo provincial para el segundo semestre del año, suspendiendo de esta manera nuevos aumentos para los funcionarios del Ejecutivo provincial para lo que resta del año”.

La Mandataria remarcó que “nosotros cerramos los acuerdos salariales al primer semestre, y aparece ahora en este segundo semestre, un aumento acordado por el Municipio de Río Grande que impactaría inmediatamente en los sueldos de la Legislatura, la Fiscalía de Estado y todos los organismos que no lo congelen”, explicó Ríos, teniendo en cuenta que “presupuestariamente no hay recursos para discutir aumentos con nadie y tampoco para nosotros”.

La dieta de la Gobernadora fue establecida mediante la Ley N°855, que en su artículo 1° determina que “será equivalente al promedio de la remuneración mensual, habitual y permanente que perciban los intendentes de los municipios de la Provincia, a la que se le adicionará un cinco por ciento (5%)”.

Ríos recordó que “a principios de la gestión la dieta de los funcionarios estaba atada a una categoría 10”, pero la Legislatura “decidió que eso era como delegarle al Ejecutivo y lo pretendió modificar con una categoría 10 de la Legislatura, pero lo ató en el mismo momento a pago de antigüedad y a título, que generaron un problema y una discusión”.

A ello sumó que “como la Legislatura no estaba dispuesta a modificarlo presentamos un proyecto de ley donde de alguna manera lo atara a las dietas de los intendentes, y que quedara claro que no éramos nosotros quienes decidíamos cómo se hacía.

Pero de las afirmaciones de la Mandataria también se puede inferir que en lo que resta del año no habrá nuevas recomposiciones salariales para ningún sector de la Administración Pública, en función de las ya mencionadas limitantes presupuestarias.

Ahora habrá que esperar cómo repercutirá esto entre los gremios estatales, que reclaman una actualización salarial.

De hecho, los docentes ya fueron al paro tras el receso invernal y del encuentro de paritarias que se realizará el lunes próximo dependerá la continuidad del plan de lucha, al que se sumarían otros sectores de estatales.