Los empleados de comercio recibieron el descanso con un gran festejo en Santa Rosa. Este sábado a la noche se realizó en el Recreo Mercantil la gran fiesta del gremio que agrupa a los empleados del sector, con sorteo de un auto 0 kilómetro, comida y baile. Del encuentro -encabezado por los gremialistas Carlos Nemesio y Rodrigo Genoni, del Centro Empleados de Comercio- también participó el gobernador Oscar Mario Jorge.

La ley 2.717, de cierre dominical obliga a los establecimientos con superficies mayores a 40 metros cuadrados a abrir de lunes a sábado de 6 a 24 horas. También estableció el cierre del día 24 de diciembre a las 18 horas y del 31 de diciembre a las 14 horas.

La ley salió en la legislatura en junio, después de un proceso de consenso entre los gremios de Pico y Santa Rosa y las cámaras de Comercio de la provincia, mirado de reojo por los directivos de los grandes supermercados. En la legislatura tomaron la ley y la sacaron adelante dos diputados con intereses en los sectores involucrados: el vernista Daniel Lovera (dirigente del CEC de Pico) y el radical Carlos Bruno (dirigente de la Cámara de Comercio santarroseña).

En el debate en las comisiones la ley sorteó los cuestionamientos de minorías religiosas que plantearon que se afectan sus derechos a elegir el día de descanso semanal, ya que algunas religiones lo establecen el sábado. Por otro lado, los impulsores mostraron el apoyo a la idea que el actual Papa Francisco había manifestado durante su paso por el arzobispado de Buenos Aires, con un discurso favorable para el fortalecimento de los vínculos familiares en el país.

Después de algunas semanas de incertidumbre, ya que en otras provincias leyes similares habían sido vetadas por el Ejecutivo provincial -el caso de Chaco-, el gobernador Oscar Mario Jorge manfiestó su apoyo a la ley y la promulgó el 2 de agosto. En el anuncio participó el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide, que aprovechó la ocasión para lanzar la campaña nacional para extender el cierre dominical a las cadenas de supermercados de grandes superficies. “Es una reivindicación humana frente al capitalismo salvaje”, sostuvo el directivo.

La semana pasada Jorge se reunió con los intendentes del interior para invitarlos a sumarse al control para que todos los comercios respete los horarios de apertura y cierre de comercios. Dentro de la actividad que realizarán las comunas, si se aplican multas se destinarán a los municipios que generaron el trámite.

La Pampa es la primera provincia que aprueba una ley de este tipo. Si bien hubo consenso para la sanción de la ley, dos semanas antes de la vigenia del cierre se generó una polémica porque la Cámara de Comercio y Afines de General Pico anunció que enviará a la legislatura provincial un pedido formal para que la ley sea modificada. El nuevo texto pide que la superficie máxima permitida para que un comercio pueda abrir sea de 100 metros cuadrados y no de 40.