El tigrense intenta sumar figuras de renombre a las –por ahora– flacas listas del Frente Renovador. En esa estrategia, intenta seducir a su amigo y periodista de Intrusos. También va por Alejandro Grandinetti en la ciudad de Rosario. Se le cayeron Tomás Bulat y Juan Pablo Varsky.
El precandidato presidencial por el Frente Renovador, Sergio Massa, hace tiempo que perdió la sonrisa. Su preocupación, más allá de que está estancado en las encuestas y en algunos casos perdiendo frente a Mauricio Macri, es que no tiene candidatos en la mayoría de los distritos.
El tigrense, sin dirigentes políticos de peso que se cruzaran al FR, se decidió por sumar periodistas famosos y gente del espectáculo. Daniel Vila, dueño de América TV, y Jorge Rial, trabajan para sumarle al dirigente renovador.
En pleno debate por la muerte del fiscal Alberto Nisman, el conductor de Intrusos decidió suspender los chimentos y convocó a Massa para que hable de sus propuestas para cambiar la justicia y de sus críticas al gobierno por el caso Nisman. No hizo un gran aporte, más allá de frases como “si hubiera sido presidente hubiese hablado ayer” o “nos acostumbramos a convivir con la impunidad”.
Desde hace tiempo, Rial se ha convertido en el principal operador de la candidatura de Massa y no duda en usar su programa de televisión, de radio o su cuenta de Twitter para reivindicar al diputado nacional. Fue quien le acercó la figura del empresario teatral Javier Faroni para candidato a intendente en Mar del Plata.
La apuesta principal de Massa es llevar al periodista de candidato en Capital Federal, distrito en el cual no tiene figuras. Cada vez que puede Massa le repite al aire a Rial: “Espero que algún día te animes vos”. Y agrega: “Jorge es un tipo que le puede dar al sistema de comunicación una dinámica fabulosa y tiene mucho para aportar”. Ante esos elogios, el periodista de Intrusos le responde: “Dejémoslo ahí”.
A Massa lo desespera no tener alguien en Capital, un distrito importante en cantidad de votos y acaso aún más importante por la repercusión que genera. Su hombre era el economista Martín Redrado, pero la escandalosa separación con la modelo Luciana Salazar lo sacó de carrera. Luego buscó en el economista y periodista Tomás Bulat pero, tras varias semanas, el mediático economista decidió bajarse de la candidatura.
Antes de Bulat, desde el massismo mandaron a tantear a Juan Pablo Varsky. El sondeo cayó en bolsillo roto: se sabe, al afamado periodista está más cerca del gobierno que de cualquier otra fuerza política; basta con escuchar en radio para advertirlo, pese a que mantiene una relación amistosa con el tigrense.
Daniel Vila, dueño de América TV y socio de José Luis Manzano en varias empresas petroleras, trabaja en estas horas para que el conocido periodista de Rosario Alejandro Grandinetti vaya como candidato a intendente por la ciudad o diputado nacional. Grandinetti conduce el programa Todos en la Ocho, que ocupa la segunda mañana de la radio AM La Ocho, propiedad del Grupo Vila Manzano.
Por ahora, sólo el productor teatral Javier Faroni aceptó jugar a la política. Ya hace campaña para alcanzar la intendencia de Mar del Plata, ciudad que conoce del derecho y del revés por su actividad teatral.
Por el momento, en la provincia de Buenos Aires el Frente Renovador no tiene periodistas pero sí un sinnúmero de pre candidatos como Darío Giustozzi, Felipe Solá, Francisco De Narváez, Mónica López y Gustavo Posse, aunque este último está a punto de saltar el charco para irse con Macri.
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