El magistrado no se presentó ayer a indagatoria porque recusó a Bavio, quien lo investiga. Las doce causas en las que el juez federal de Orán, Raúl Reynoso, liberó a narcotraficantes suman dos toneladas de cocaína y una cantidad de precursores químicos suficientes para producir otras cuatro toneladas de ese estupefaciente.Según lo investigado hasta aquí por la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) y la Fiscalía Federal Nº 2 de Salta, se presume que la droga tenía como destino final Europa, con lo cual la valuación realizada sobre las dos toneladas de cocaína asciende a unos 70 millones de euros. En el caso de los 35.000 litros de tolueno (el precursor químico que intentaron pasar en un camión cisterna declarándolo como alcohol etílico ante Aduanas) la valuación "en el mercado negro es muchísima plata", contó una fuente vinculada a la investigación judicial.Las cifras dan cuenta del volumen de la actuación de Reynoso y los siete detenidos que hoy enfrentan una causa por "asociación ilícita, cohecho y prevaricato": cuatro abogados, el jefe de Despacho del Juzgado de Orán y dos hermanos que serían testaferros del juez.

El soborno

¿Cuánto se presume que cobró la red a cambio de las libertades a narcos? Esa cifra se desconoce y difícilmente pueda ser calculada, según la fuente consultada por El Tribuno, ya que se trata de dinero que no quedó registrado. Solo se conoce por los dichos de los imputados y los testigos.En las doce causas solo quedó el registro de una camioneta Volkswagen Amarok y de un campo de 700 hectáreas en el departamento Rivadavia, entregados en dos causas distintas. Los títulos de propiedad de ambos bienes figuran a nombre de terceras personas, pero en las testimoniales que tomó el juez federal Nº 1, Julio Bavio -quien entiende en la causa-, imputados y testigos habrían admitido que tenían como propietario oculto al magistrado.

Punto de inflexión

En los pasillos del edificio judicial de calle España dicen que existían sospechas sobre las actuaciones Reynoso antes de que se conociera la imputación que le hicieron el fiscal federal Nº 2 de Salta, Eduardo Villalba y el titular de la Procunar, Diego Iglesias. La liberación del empresario boliviano José Luis Sejas Rosales, acusado de traficar drogas en sus camiones cisterna, fue la causa que terminó de encender todas las alarmas."En esa causa se advertía una conducta bastante irregular", dijo una fuente que pidió el anonimato. La Cámara Federal de Salta planteó, entonces, que Reynoso "había beneficiado considerablemente a Sejas Rosales", indicó. Lo que aún faltaba eran pruebas para unir ese beneficio de libertad con una retribución económica.Un caso históricoAyer, Reynoso no se presentó a declarar ante Bavio que lo esperaba en el edificio de España 394. Envió un fax advirtiendo que no lo hacía porque recusó a Bavio ante la Cámara Federal de Salta, en virtud de las denuncias que le hizo el pasado viernes.Su ausencia causó revuelo. Sucede que se trata de una investigación que tiene nada menos que a un magistrado federal en el ojo de la tormenta, junto a otros hombres y mujeres del derecho. Todos, sospechados de beneficiar a narcos en un caso sin precedentes en la historia de la Justicia federal en Salta y con escasos antecedentes a nivel país. "En este tipo de denuncias la Justicia va más allá de la sustancia prohibida, busca desarticular el movimiento de estructuras, de organizaciones vinculadas a este tipo de hechos conexos con otros también delictivos", señaló la fuente.En esta causa, que se conoció el miércoles de la semana pasada cuando se allanaron las oficinas de Reynoso y se produjeron la mayoría de las detenciones, tiene como principal sospechoso al juez federal que hace diez años se desempeña en una de las zonas más calientes en materia de narcotráfico en el país. Orán, junto con Tartagal y Santa Victoria Este conforman la zona fronteriza por donde se sospecha que ingresa el 90 por ciento de la cocaína que ingresa al país ya sea en tránsito o para distribuirse en el mercado local.

Una causa que va más allá de yerros

Las pruebas están en los expedientes que tramitó el mismo juez que está siendo acusado. Fuentes judiciales aseguraron ayer a El Tribuno que lo que se investiga en la causa contra el juez federal Raúl Reynoso, va más allá de “errores judiciales que pudiese haber cometido el magistrado de Orán”. Las doce causas (la semana se presentaron once y el martes último se conoció una más) fueron analizadas durante bastante tiempo antes de ser presentadas en el Juzgado Federal Nº 1 de Salta.“Las pruebas están en los expedientes que llevó adelante el mismo juez”, afirmaron en diálogo con este matutino.

Dos expedientes más

Trascendió ayer que tanto la Procunar como la Fiscalía Federal Nº 2 tendrían en estudio al menos dos causas más contra Reynoso, que se podrían sumar, en los próximos días, a las ya hechas públicas. Los expedientes ya fueron retirados de las oficinas del Juzgado oranense y su contenido es analizado por los abogados.En ambas causas -cuyo contenido no trascendió- está la dudosa conducta del magistrado y algunas de ellas incluso podrían derivar en nuevos pedidos de detención de personas.No se trataría, según se pudo averiguar, de cuestiones políticas ejercidas desde algún sector -dentro y fuera del Poder Judicial- en contra del juez Reynoso, sino de cuestiones estrictamente vinculadas con lo judicial. “Cualquier persona que conozca el Derecho y lo considere como un servicio a la comunidad, se podrá dar cuenta de que el accionar del doctor (Reynoso) es, por lo menos, irregular”, confió la fuente a este medio.