De la Sota cuestionó que haya tantos voluntarios remunerados. Este esquema del Plan del Fuego es el que avaló la propia Provincia.
El gobernador José Manuel de la Sota cuestionó ayer, por segundo día consecutivo, que gran parte de los fondos del Plan Provincial de Manejo del Fuego se destine al “pago de sueldos” de bomberos voluntarios. Sin embargo, el modo de reparto de los recursos que recauda el impuesto al fuego, vigente desde 2005, es el acordado por el Gobierno de Córdoba con las federaciones de bomberos.
El esquema actual implica que unos 540 bomberos voluntarios, de los casi cinco mil existentes, perciban una especie de remuneración (de 3.900 pesos) a cambio del compromiso de ciertas tareas diarias de prevención y de vigías contra el fuego.
La reacción del gobernador surgió en el marco de los reclamos que algunos cuarteles formularon porque en lo que va del año no percibieron fondos del Plan Provincial del Fuego.
“En realidad, cada vez tenemos más bomberos rentados, y esto creo que no es bueno. Si quieren pasar a ser rentados, habrá que discutir si conviene tener 166 cuerpos de bomberos. Han surgido como hongos en los últimos años”, señaló el gobernador a la radio Cadena 3.
Según el Plan Provincial de Manejo del Fuego, hay 173 cuarteles hoy en el interior de Córdoba.
“Una cosa son los bomberos voluntarios, que realmente tienen una vocación muy elogiable. Y otra son las personas que nunca agarraron tal vez ni una manguera para regar plantas, que son los directivos”, agregó De la Sota, tras advertir, por primera vez, que “se está desnaturalizando el fondo contra el fuego”, y que la prioridad del gasto debería ser el equipamiento para combatir incendios.
También admitió la posibilidad de revisar el sistema para evaluar la creación de una brigada de bomberos profesionalizada y rentada.
La idea de crear un cuerpo profesional fue planteada el año pasado por la Cámara de la Madera, que agrupa a forestadores y aserraderos de Córdoba. Propusieron una fuerza de 150 hombres para el ataque rápido, con la colaboración posterior de los voluntarios. “Pero la Provincia nunca nos respondió”, se quejaron desde esa entidad.
Santiago Clavijo, legislador del Frente Cívico, adelantó ayer que ese bloque presentará la semana próxima un proyecto de ley para reformular el Plan del Fuego. Entre otras variantes, contemplará la creación de “una brigada profesionalizada, especializada y reducida”.
Puertas adentro
La cuestión de los voluntarios rentados hace tiempo que genera discusión dentro de los cuarteles. En algunos, se plantea que no se justifica y que motiva conflictos y competencias con la mayoría de agentes que no cobra. Otros, sobre todo en los destacamentos más chicos, sostienen que es el único modo de sostener a un plantel mínimo de bomberos disponibles. “Si no, se van a buscar trabajo y dejan la actividad”, argumentan.
El dilema admitido por todos es que si el Plan del Fuego les exige tareas diarias, no pueden ser hechas por voluntarios que acudan sólo ante emergencias.
El cuadro se complica además porque los aportes de la Provincia para esos pagos se hacen por cuatrimestre. “Este año, por ejemplo, recién ahora estamos cobrando lo acumulado de enero a septiembre. Esos bomberos remunerados no cobran desde enero y muchos de ellos no cumplieron en estos meses esa contraprestación de tareas, porque no cobraban”, admitió el jefe de un cuartel serrano. Ahora, deberían recibir el pago por ocho meses juntos.
En este marco, la revisión del modo de reparto de fondos va sumando puntos.
Pagan ahora ocho meses juntos
Pagos. Según el ministro de Gobierno y Seguridad, Walter Saieg, 128 cuarteles cobraron en las últimas semanas los aportes acumulados de enero a septiembre. Unos 13 lo percibirían en breve y 25 quedan afuera “por no tener los papeles en regla”.
Quejas. Algunos cuarteles que aún no cobraron insistieron en sus reclamos esta semana.
Equipos. La Provincia entregó ayer equipos para incendios y accidentes viales a 160 cuarteles. Indicó que fue una licitación por nueve millones de pesos, con fondos del Plan del Fuego.
Fondos. Desde la oposición se viene cuestionando la “falta de transparencia” en la rendición de los números de recaudación y gastos del impuesto al fuego.
Comentá la nota