El representante legal del Club, Valentín Grasso, tildó de “fundamentalistas” a los asambleístas que “critican por criticar” y dijo que “tratar de amortiguar espacios verdes en zonas urbanas es un exceso que no es necesario”.
Desde ya un largo tiempo las agrupaciones ambientalistas y ecologistas que defienden la Reserva del Puerto mantienen un duro enfrentamiento con el Club Aldosivi por las obras que allí se realizan.
Por el momento el avance de las tareas encaradas por el Club dependen de resoluciones judiciales, pero mientras tanto el representante legal de Aldosivi analizó la situación, defendió las obras y criticó a los asambleístas.
En declaraciones al programa radial de Nicolás Mondino, el abogado Valentín Grasso repasó en primer lugar que antiguamente la zona aledaña a la Reserva del Puerto era “un lugar abandonado, con mucha basura, maleza y escombros”.
Incluso recordó que “algunos pioneros de Puerto de Mar del Plata me han contado que jugaban ahí y que todavía estaban los rieles del ferrocarril y las piedras que se llevaban para armar las escolleras”.
A su entender, la Reserva Natural surgió como consecuencia del “abandono” y el “crecimiento del agua”. Gracias a eso “se fue armando ese pequeño lugar”, indicó Grasso.
En cuanto a la obra, el representante legal dijo que Aldosivi “ha hecho lo que tenía que hacer” y destacó que el Club “ha sido prudente y decidió no construir un estadio en ese lugar, por un montón de factores, pero no dejó de manejar el tema ecológico y sustentable que hoy tiene tanta vigencia”.
Además, aseguró que la obra del Club Aldosivi constituye un “proyecto sustentable”. Explicó en este sentido que el club “gastó tiempo y dinero” en ver cómo se construían predios deportivos en otras ciudades. “Yo mismo he tenido que viajar a Brasil para ver, cómo con certificaciones internacionales se construían predios sustentables”, precisó.
Por otro lado, Valentín Grasso se refirió a los ambientalistas que se oponen al avance de las obras de Aldosivi sobre la Reserva. Los definió como “grupos muy cerrados, casi fundamentalistas”, que en su proceder y a su entender “atacan por atacar”.
“Aldosivi ha hecho una obra espectacular, con recursos propios, sin contraer deudas y dando trabajo. Hay más de 600 chicos haciendo prácticas deportivas y unos 200 profesionales”, remarcó el representante legal del Club, quien detalló que se están instalando paneles solares y molinos para generar energía eólica en el predio.
A su entender, “tratar de amortiguar espacios verdes en zonas urbanas me parece un exceso que no es necesario en este momento”, sostuvo en relación al reclamo de Greenpeace y los defensores autoconvocados de la Reserva.
Por último, Grasso aclaró que hoy la Reserva del Puerto se encuentra “bajo el amparo de resoluciones judiciales que impiden cualquier modificación del status de lo que tenemos nosotros”. No obstante, formalmente confirmó que el Club Aldosivi “no tiene ningún cortocircuito ni con ecologistas, ni con ambientalistas”. “Somos verdes, como la camiseta”, completó.
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