La visita de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a la Provincia, opacó la cobertura del primer día de gestión de Adolfo Scaglioni y Carlos Andrade como representantes del Gobierno en la empresa Aguas de La Rioja, privatizada a principios de la década.

El hecho es por demás trascendente en el marco de la nueva relación que Beder Herrera viene anunciando que sostendrá con las empresas de servicios públicos que están en manos de concesionarias privadas, desde la asunción de su mandato en marzo de 2007.

El fin de semana el Ejecutivo le dio forma al decreto 1097, que pone en funciones a ambos representantes del Estado en la órbita de Aguas de La Rioja, "luego de que la empresa aceptara por nota el condicionamiento" establecido por el Gobernador en el decreto 1011 del 14 de agosto pasado para volver a oxigenar financieramente a la concesionaria del agua.

Tanto Scaglioni como Andrade ya están trabajando en las dependencias de la casa central de la empresa sobre la avenida Rivadavia, aunque por ahora alternan gestiones con la Casa de Gobierno, sin dudas para completar tramos de la auditoría que comanda el ministro de Hacienda Ricardo Guerra, por un lado y el secretario del Agua, Germán Gracia, por el otro.

Acciones

En diálogo con NUEVA RIOJA, Scaglioni dijo ayer que la tarea encomendada por el Gobernador excede la sola fiscalización de las cuentas de la empresa y agregó que están también dentro de las facultades que se les otorgaron la posibilidad de viabilizar y ejecutar obras.

"Nuestra primera misión es garantizar que el servicio no decaiga de acá en más y que la gente no sufra la falta de agua en el verano que se ya avecina", describió Scaglioni que se comprometió a agilizar tareas que la empresa tiene pendiente y que son necesarias para que llegue un normal abastecimiento a todos los barrios de los tres departamentos alcanzados por la concesión (Chamical, Chilecito, y Capital).

"Entre el lunes y hoy ya encaramos algunas acciones que la gente va a conocer, porque notará las mejoras", remarcó Scaglioni.

En este sentido dijo que son muchas y particulares las realidades que hay que abordar en cada departamento y que es necesario abocarse urgentemente a solucionarlas para poder lograr el objetivo de recomponer el servicio en el menor plazo posible.

Según el funcionario es necesario volver al servicio a varios pozos que por ahora están parados en la Capital, como así también se hace necesario controlar en forma urgente el tema de las pérdidas de agua en Chilecito, que perjudican las obras de infraestructura urbana en la ciudad.

También tratarán de encarar gestiones tendientes a lograr que se conecte el servicio de agua potable en aquellos lugares donde se los soliciten. En este item hay que resolver los nuevos barrios que se levantaron con los planes nacionales de vivienda que exigen inversiones inmediatas de parte de la empresa.

Sin embargo un tema difícil de enfrentar serán las conexiones clandestinas o las llamadas filtraciones en el sistema que hace que algunas zonas se vean menos favorecidas con la prestación y es una situación que se presenta en toda la Provincia.