Los apoderados y el personal judicial retomaron esta mañana el escrutinio definitivo en Río Negro, iniciado ayer por las mesas de Viedma. Actualmente, el repaso de las actas se realiza en las mesas de numeración superior al 300, después de cumplir con las tareas en aquellas de la zona atlántica, y el operativo incluirá a las 1693 urnas del domingo, previéndose su finalización para la tarde-noche de mañana o el viernes.

En la primera jornada, el escrutinio empezó por Viedma, que tenía tres mesas no cargadas en el escrutinio provisorio. Vale recordar que el recuento del ministerio del Interior arroja una diferencia de 756 votos para Juntos por el Cambio sobre el Frente de Todos en el segundo lugar, otorgando la segunda banca para Aníbal Tortoriello.

El conteo inicial no incluyó 20 mesas, de las cuales, tres eran viedmenses, que ya se computaron y el resultado de las mismas fueron 18 votos a favor del FdT. Simultáneamente, el Tribunal Electoral resolvió 11 votos de JxC recurridos y los consideró positivos. Así, esa inclusión arrojaría que el frente encabezado por el Justicialismo recortaría 7 votos.

Y se siguen repasando actas y, además, se espera que la Cámara Electoral Nacional incluya votos de los rionegrinos privados de la libertad y de aquellos radicados en el exterior. El número de esos votantes no está confirmado, pero se estiman que serían unos 300.

Por otra parte, JxC realizó un escrutinio propio de las 20 mesas faltantes -3 de Viedma, 10 del Alto Valle, 1 de Sierra Grande, 1 de San Antonio, y 5 de Bariloche- y concluyó que el Frente de Todos estaría sumando a su favor 395 votos y, luego, le resta 150 por los recurridos a favor de la alianza de radicales y el PRO. Su estimación indica así que la lista encabezada por Ana Marks acortarían 245 de los 756 de ventaja de Tortoriello.

Las mayores vigilancias se advierten -obviamente- de los representantes del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio. El escrutinio está encabezado por el Tribunal electoral, integrado por los jueces federales Richard Gallego y Hugo Greca, y el presidente del STJ, Ricardo Apcarián.