Debían vigilar a dos presos hospitalizados. Los pescaron cuando una mujer les practicaba sexo oral. El Ministerio de Seguridad los pasó a disponibilidad.
El hecho fue informado por el Ministerio de Seguridad provincial con el eufemismo de que los guardiacárceles violaron "la ética profesional y la seguridad", pero de manera extraoficial trascendió que la falta consistió en haber estado durante su servicio con una mujer que les practicaba sexo oral cuando personal del hospital José María Cullen los sorprendió. Ocurrió el miércoles pasado, en la madrugada, en el sector de Neurocirugía del nosocomio. Personal de guardia del hospital descubrió a los penitenciarios con la mujer, en momentos en que debían estar custodiando a dos convictos que habían sido derivados desde un penal de la ciudad capital para ser internados y sometidos a una intervención quirúrgica.
Las autoridades del hospital denunciaron a los guardias ante el Ministerio de Seguridad, que dispuso el pase a disponibilidad de los agentes.
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