Con motivo de la visita del Papa Francisco a la ciudad de Asunción, Paraguay el próximo 10, 11 y 12 de julio, el Instituto de Turismo del Chaco se hace eco de la campaña de vacunación que promueve el Ministerio de Salud de la Nación y reitera a los viajeros que pretendan acudir a dicho evento, tomar recaudos contra la fiebre amarilla.

Se recomienda a las delegaciones y viajeros que se realicen la vacunación Antiamarílica quince días antes del viaje. Los interesados pueden realizarse los días lunes y jueves de 9 a 13, en la Unidad Sanitaria del Chaco situado en  Remedios de Escalada 285 de la ciudad de Resistencia.

Deberán acudir con el Documento Nacional de Identidad (DNI) y en caso de ya estar vacunados con la constancia de la misma a fin de realizarles el certificado Internacional de Vacunación o Profilaxis.

Otras consideraciones

En caso de no estar vacunados, o haberse colocado la vacuna en un tiempo menor al señalado, se debe evitar picaduras de mosquito usando repelentes, ropas claras y de mangas largas y pantalones largos.

Se recomienda no permanecer en espacios abiertos durante las horas donde hay más mosquitos: desde el atardecer hasta entrada la noche.

Es necesario usar repelente en abundancia y renovar la aplicación cada tres horas, especialmente si se estuvo en contacto con agua o si se transpiró en abundancia.

Para evitar la reproducción de los mosquitos, es recomendable vaciar todos los envases que acumulan agua en el sitio de permanencia u hospedaje.

Sobre la enfermedad

La fiebre amarilla viral se transmite por la picadura de un tipo de mosquito que previamente picó a una persona enferma, es decir, no todos los mosquitos contagian la fiebre amarilla, sólo aquellos infectados. Por ello, el contagio no se produce a través del contacto personal o con objetos.

Si bien cualquier persona puede contraer la fiebre amarilla, los adultos mayores y los niños tienen mayor riesgo de presentar una enfermedad grave.

Los síntomas iniciales pueden ser similares a los de una gripe e incluir fiebre, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares. A medida que la enfermedad progresa, sangran las encías y la orina también contiene sangre. El paciente puede también sufrir ictericia (coloración amarilla de la piel). Ante estos síntomas debe concurrir al servicio médico más cercano.