Santa Fe.— Vecinos afectados por las fumigaciones y organizaciones ambientalistas reiteraron esta semana el reclamo para que se efectivice el cumplimiento de la resolución interministerial que prohíbe utilizar las banquinas con fines agrícolas y que se destruyan los cultivos en los espacios vedados donde se efectúen.

En diciembre último los vecinos realizaron una presentación formal ante la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) para reclamar que se dispongan las medidas necesarias para dar cumplimiento a la resolución del Comité Interministerial de Santa Fe, dictada en marzo de 2011, mediante la cual se prohibió la utilización de banquinas para actividades agrícolas y se encomendó al Ministerio de Obras Públicas a través de esa Dirección la destrucción de todo tipo de cultivos que en los espacios vedados donde se realizaran.

"A un mes de aquel reclamo, por cierto redundante, exigiendo algo tan primario como el respeto al estado de derecho y la institucionalidad, vemos con asombro que ni una sola medida se tomó al respecto y las acciones de facto continúan impunemente en los espacios vedados, frente a la pasiva mirada de los funcionarios públicos quienes con idéntica impunidad incumplen sus deberes", sentencia el documento de los vecinos damnificados nucleados por la campaña "Paren de Fumigarnos", que lleva adelante el Centro de Protección a la Naturaleza (Cepronat).

La presentación aporta datos concretos, como la existencia de sembrados en la ruta provincial 280, entre la localidades de Eusebia y Colonia Aldao; ruta provincial 80, entre las localidades de Progreso y Hipatia; ruta provincial 4 en Cululú, y la ruta 93 entre las localidades de Cañada de Ucle y Chañar Ladeado.

En diciembre pasado denunciaron la existencia de sembrados en banquinas de esas rutas provinciales y hace unos días sumaron a ese listado a las banquinas que se encuentran sembradas en las rutas provinciales 13, 66, 90 y 14, a la altura de El Trébol, Los Cardos, Cañada Rosquín, San Martín de las Escobas, Colonia Belgrano, Fuentes, Máximo Paz, Alcorta y Bigand.

Carteles y sembrados. "En muchos casos en torno de carteles, tan notorios como inútiles, que recuerdan la prohibición mientras debajo tienen soja", señalaron.

También aseguraron que "en algunas rutas nacionales que surcan la provincia también puede observarse este tipo de actividades ilícitas, ello no excusa la inacción provincial por negligencia, impotencia o complicidad respecto de actividades particulares específicamente prohibidas y que atentan contra el bien común, conforme los fundamentos de la resolución en cuestión, cuyo cumplimiento reclamamos por enésima vez".

Los vecinos consideraron que "de continuar con «la vista gorda» la ciudadanía recibe un peligroso mensaje, ya que si ello es factible en ilícitos económicamente tan irrelevantes con graves perjuicios sanitarios y medioambientales, qué no sería posible cuando los intereses económicos involucrados tuvieran otra magnitud".

Antecedente. Estas agrupaciones de vecinos de pueblos fumigados presentaron a fines de diciembre último el primer pedido formal con este fin, ante la DPV para que cumpla con la resolución del Comité Interministerial de Salud Ambiental, que prohibió utilizar las banquinas para tareas agrícolas.

La resolución, dictada entre otros, por el actual director de DPV, Juan José Bertero, cuando era Ministro de la Producción, dispone que ante el incumplimiento, esa Dirección deberá proceder a la destrucción de los cultivos, liberando áreas ilegalmente ocupadas, reservadas a la conservación de la biodiversidad y como corredores biológicos.

Los vecinos afectados manifiestan su preocupación por declaraciones a medios capitalinos en las cuales funcionarios de la repartición manifestaron su voluntad de incumplir la resolución, y extender la decisión de tomar sanciones para permitir la recolección de lo sembrado. "Por esta vez pase, parece ser el mensaje, lo cual constituiría un grave antecedente que premiaría al incumplidor, puesto que la totalidad de esas actividades se realizaron violando la resolución, que data de marzo de 2011", remarcaron.

Peligroso obstáculo. La ley nacional de tránsito, a la cual adhiriera la provincia a fines del año 2010, impide transitar o detenerse en banquinas salvo emergencia, con lo cual toda la maquinaria involucrada en actividades agrícolas en una vía de escape como son las banquinas ante un eventual accidente, constituyen peligrosos obstáculos de los que difícilmente el funcionario o la provincia puedan excusarse.

En ese sentido los vecinos autoconvocados solicitaron también una mayor publicidad tanto del contenido de la resolución como de las acciones realizadas o a realizarse por su efecto disuasor, sin perjuicio de las sanciones administrativas que corresponden a toda infracción.

Al respecto recordaron que "ningún interés particular está por encima del interés general, por lo cual la resolución debe ser de cumplimiento inmediato y obligatorio.

Limpieza

En enero del año pasado la Dirección Nacional de Vialidad realizó una campaña de limpieza de banquinas en la ruta nacional 158, que une San Francisco con Río Cuarto en Córdoba. Más allá del enojo de los productores, segaron con tractores y máquinas desmalezadoras gran cantidad de kilómetros de banquinas ilegalmente sembradas con soja.