Por Mariano Cuparo Ortiz

 

Pese a que por la todavía elevada inflación la demanda interna siguió dando señales de caída en julio, la actividad económica anotó una relevante recuperación en ese mes: mejoró 1,7% mensual desestacionalizado, de la mano del agro y de la minería. El consumo en tanto en los supermercados como en los comercios mayoristas continúo en picada y los primeros datos adelantados de agosto dan cuenta de que la economía ingresó en un efecto serrucho: las proyecciones apuntan a una nueva caída mensual, con la industria lejos de tocar piso y el consumo aún en retroceso. El Gobierno proyecta que el año termine con una baja del PBI per cápita de casi el 5%.

El presidente Javier Milei celebró en su cuenta de Twitter: "Estamos saliendo". Desde la consultora ACM afirmaron: "A pesar de la contracción de la demanda interna, que afecta a los sectores más ligados, como la industria, el comercio y la construcción, los sectores más dinámicos (como el agropecuario) han evitado que se profundice la contracción observada en el segundo trimestre".

El INDEC publicó el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) correspondiente a julio, que además de la mejora del 1,7% contra junio arrojó una baja interanual del 1,3%. En el acumulado interanual de los primeros siete meses, la baja fue del 3,1%. Esto da cuenta de que las proyecciones reflejadas tanto en el Presupuesto 2025 como en el REM del BCRA, así como también en la estimación formulada ayer por la OCDE, están esperando un cierto empeoramiento para el PBI de acá a diciembre.

La actividad parece haber tocado piso en abril. Desde entonces ingresó en una suerte de serrucho: en mayo hubo una mejora del 0,5% mensual desestacionalizado, en junio una caída del 0,3% y en julio la mejora del 1,7%. El economista Amilcar Collante se preguntó en su cuenta de Twitter si "seguirá el modo serrucho en la actividad" y se respondió que "según los datos adelantados de agosto parece lo más probable" Tras tocar piso en abril, la actividad encontró que ese suelo está "pegajoso", tal como había adelantado la consultora Epyca en un informe reciente.

El Gobierno señaló esperar, en el Presupuesto 2025, una caída del 3,8% en el PBI de 2024. Con el INDEC proyectando que la población crecerá 0,8% en el año, de corroborarse esa contracción, se tratará de una baja del 4,7% para el PBI per cápita. Se trata del peor año en términos de actividad económica desde el 2020 pandémico, cuando la actividad se derrumbó en forma histórica debido a las restricciones dispuestas en el marco de la cuarentena. Luego, para ver otra merma tan grave en el producto es necesario remontarse hasta el 2009.

Tal como adelantó Collante, los datos apuntan a una nueva baja en agosto, que confirmará la dinámica de serrucho. Ayer, FIEL publicó una baja de la industria del 0,7% mensual en agosto. Se sumó a la proyección de la UIA, que aunque todavía no dio un número afirmó: "Los datos anticipados de agosto indican una nueva caída interanual y una baja en la comparación mensual, revirtiendo la mejora de julio". Además, en el mes cayeron un 7% los despachos de cemento, según la desestacionalización de la consultora Outlier. Asimismo, las importaciones medidas por el INDEC se derrumbaron un 10,1% en el mes, con especial fuerza en la de insumos productivos.

Lejos de todo optimismo, desde la OCDE empeoraron las proyecciones para el PBI 2024: antes esperaban una baja del 3,3% y ahora pasaron a proyectar una contracción del 4%.