Las pruebas de carga comenzarán a partir de las 08 hs. y se extenderán hasta las 18 hs., periodo en el que se procederá al corte total del tránsito en ambos puntos. En la zona se realizará un operativo de seguridad vial a cargo de personal de Vialidad Nacional, la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Policía Vial de la provincia de Buenos Aires. En caso de mal clima las pruebas se suspenden.

Los usuarios del corredor podrán circular a través de los siguientes desvíos por rutas provinciales:

-A la altura del puente sobre el arroyo Pigüe: conduciendo desde la mano ascendente (sentido a Trenque Lauquen) se podrá desviar por la RP 67, a la altura de Pigüe, hasta Coronel Suárez para luego ingresar a la RP 85 y finalmente ingresar a la RP 60, para retomar la RN 33. Mano descendente (sentido Bahía Blanca), el recorrido será el mismo, pero a la inversa.

-A la altura del puente sobre el arroyo Guaminí: desde mano ascendente (sentido Trenque Lauquen) los usuarios podrán desviarse a través del acceso a Carhue, hasta ingresar a la RP 60, y de allí retomar la RN 33. Mano Bahía Blanca, el recorrido será el mismo, pero a la inversa.

Los estudios permitirán determinar la posibilidad de habilitar la circulación de bitrenes y aumentar hasta 75 toneladas la capacidad de los cargamentos transportables. La habilitación de este tipo de vehículos permitirá dinamizar uno de los corredores agrícolas más importantes del país, a través del cual se conectan los puertos de Rosario y Bahía Blanca.

“Estas pruebas sobre la ruta 33 son un paso importante que estamos dando en pos de mejorar la competitividad de uno de los corredores más importantes de la provincia de Buenos Aires. La incorporación de los bitrenes es una demanda histórica del sector productivo para bajar los costos logísticos de aquellos productores que tienen que transportar grandes volúmenes de carga a través de largas distancias”. –Patricia Gutiérrez, administradora general de Vialidad Nacional.

La incorporación de bitrenes es un reclamo histórico del sector productivo, estas unidades poseen una potencialidad en la reducción de costos de entre un 25% y un 35%. El adicional de carga neta que puede llevar un bitren respecto de un vehículo convencional puede ir como máximo entre un 40% más (configuración de 20.50 m y 60tn) y un 70 – 75% más (configuración de 30.25 m y 75tn).

A partir del uso de bitrenes y las nuevas configuraciones de vehículos de carga el Gobierno Nacional busca aumentar la productividad y mejorar la seguridad en las rutas, sumando más tecnología y capacidad de carga. En lo que va del año, las principales empresas fabricantes de bitrenes entregaron más de 32 unidades para su utilización, y actualmente existen otras 25 en proceso de producción. En lo que respecta la escalabilidad de camiones tradicionales, empresas como YPF ya llevan más de 100 unidades nuevas o adaptadas.

La baja de costos logísticos genera la ampliación de las fronteras de producción, que se puedan instalar fábricas más lejos de los centros de consumo, generando más exportaciones para ganar más mercados en el exterior. Esto traerá más trabajo y el ingreso de divisas al país. De acuerdo a estudios del Ministerio de Transporte, la utilización de las nuevas configuraciones generará un ahorro de costos logísticos del orden de los 1587 millones de dólares a 2030 y cercano a los 200 millones de dólares el año que viene.

Ya son 20 las provincias adheridas o en proceso de adhesión al decreto 32/2018 que permite la circulación de vehículos de gran porte. Entre las primeras se encuentran Misiones, Neuquén y Mendoza mientras que Córdoba, Río Negro y Santa Fe se encuentran próximas a sumarse.