No resulta ajeno a los hechos, el director del multimedios La Capital, Florencio Aldrey Iglesias,  quien frecuenta a ambos políticos y a quien se lo vincula tanto con Daniel Scioli como con Rajoy, en operaciones que se relacionan con el financiamiento de la política, a través del lavado de activos ilícitos y blanqueo de dinero.

Hoteles sin pasajeros y medios de comunicación, sólo sostenidos exclusivamente por pautas oficiales, son la continuidad de un modus operandi, que insólitamente se ha mantenido y prolongado a partir del 2015, como puede observarse con total desenfado a través de su gráfica monopólica.

No resultan casuales las fotografías de Aldrey Iglesias, en sus establecimientos hoteleros, donde es tomado por sus propios reporteros gráficos, junto a los ministros de Justicia de la Nación y de la Provincia, Germán Garavano y Gustavo Ferrari, respectivamente, a los efectos de transmitir posiciones de inmunidad e impunidad.

Aldrey Iglesias junto a Cristóbal López, Fabián De Souza, Sergio Szpolski, Matías Garfunkel, Víctor Santamaría, el denominado Grupo Olmos (Vía la UOM en manos del metalúrgico Antonio Caló), entre otros, formaron parte de la construcción mediática del kirchnerismo en el poder, en una red de difusión del relato oficial entre el 2003 y el 2015.

Sobran los indicios y las evidencias de las maniobras, que han perpetrado a través del manejo de los medios de comunicación, que han manejado y que tienen a Florencio Aldrey Iglesias y su multimedios, como uno de los exponentes más importantes.

 Inexplicablemente en la actualidad continúan captando fondos y recursos del aparato estatal, como cuando fue operador de la campaña presidencial de Daniel Scioli hasta 2015, y que en la actualidad articula un claro sesgo opositor que se refleja en todas sus publicaciones.