Esta cifra, que en un 55 por ciento está compuesta por motocicletas de distintas cilindradas, incrementa el parque automotor de una Ciudad que carece de un centro para llevar a cabo la Revisión Técnica Obligatoria (RTO). Los titulares de las unidades deben viajar a Sunchales, San Jorge o Recreo, para hacer la supervisión correspondiente a los vehículos con más de dos años de uso.

El Gobierno provincial publica en su página web que "todos los vehículos automotores, acoplados y semirremolques destinados a circular por la vía pública están sujetos a la revisión técnica periódica a fin de determinar el estado de funcionamiento de las piezas y sistemas que hacen a su seguridad activa y pasiva y a la emisión de contaminantes".

Asimismo aclara que "la Revisión Técnica Vehicular Obligatoria, promueve el mantenimiento de las condiciones mecánicas de seguridad a lo largo de la vida útil de los vehículos, generando reducción de los accidentes de tránsito, causados por fallas técnicas y disminución de la contaminación ambiental mejorando la calidad del aire".

Pero la realidad indica que la RTO que estaría en Rafaela, y que también beneficiaría a la región, debe esperar, porque aún no se han modificado los pliegos licitatorios para la instalación de los talleres.

Cabe recordar que en diciembre de 2009, el concurso de ofertas encarado a través del municipio local, fue declarado desierto por la falta de interés de los distintos empresarios. Por eso la gestión local pidió al Gobierno provincial para que se modifique el pliego.

Se envió un borrador que incluye las inquietudes presentadas por los interesados en la instalación de las RTO. Las modificaciones abarcarían no sólo a Rafaela sino a los demás centros en donde se instalen los talleres.

El punto que mayor fuerza tiene entre los interesados es el relacionado con el costo del servicio, ya que está, actualmente, en equivalencia con el precio de venta al público del litro de gasoil Ultra Diesel en las estaciones de servicios YPF del Automóvil Club Argentino.

Los empresarios pretenden que sea variable con la inflación del IPEC o las modificaciones salariales determinadas en SMATA y la UOM, que son los gremios a los cuales se incluirá la mano de obra que emplearán.

Hasta el momento no hubo noticias desde el gobierno de Hermes Binner y las RTO siguen en stand by.

La principal preocupación, que gira en torno al correcto mantenimiento de los rodados para que también puedan reducirse los accidentes de tránsito, no tiene, desde este punto un correlato serio y a corto plazo.