El Concejo Deliberante aprobó por unanimidad una ordenanza que impide a familiares y concubinos de los empleados municipales acceder a un trabajo en las dependencias públicas. Aquellos que ya tengan contrato, deberán rendir un examen si desean renovarlo.
"No ponemos en discusión las capacidades que puedan tener los familiares. Queremos buscar la mayor transparencia y poner en igualdad de condiciones a todos los vecinos", aclaró el Presidente del Concejo Deliberante Jorge Maina.
"No entra nadie si no es por concurso, en los cargos no electivos, claro", explicó Maina. El HCD aprobó la normativa por voto unánime de los 9 ediles que lo componen.
Apuntamos a un mayor marco de transparencia y que esta iniciativa "pueda replicarse en los ámbitos municipales, provinciales y nacionales".
Entre los fundamentos de la llamativa ordenanza se menciona la posibilidad de desfavorecer a quienes puedan resultar idóneos para un cargo, en beneficio de quienes mantienen algún grado de parentesco con quienes dirigen los destinos de la ciudad en materia ejecutiva o legislativa.
Con lo aprobado se restringió el ingreso como personal contratado y transitorio a la Municipalidad de Rafaela de parientes por consanguinidad en línea ascendente y descendente hasta el segundo grado y en línea colateral hasta el cuarto grado; por afinidad en línea ascendente y descendente hasta el segundo grado y en línea colateral hasta el cuarto grado y del cónyuge o conviviente" del Intendente, concejales, Jefe de Gabinete, secretarios y subsecretarios del Ejecutivo, personal de Gabinete, Fiscal municipal, jueces de falta, secretarios privados del intendente y de los secretarios y prosecretarios del Concejo.
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