En la Facultad de Agronomía se publicó un libro que sintetiza una serie de encuentros y discusiones que se dieron en torno a los datos del último Censo Nacional Agropecuario (CNA-18).
Fue coordinado por Santiago Ferro Moreno, Roberto Mariano, Santiago Perez y Rocío González, docentes investigadores de la Facultad de Agronomía y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Participaron del libro veintidós autoras y autores, expertas/os en diversas disciplinas del sector agroalimentario.
El libro se divide en doce capítulos que aportan sobre el análisis, la evolución y las perspectivas futuras del sector agropecuario en Argentina en general y en La Pampa en particular. En cada uno de los capítulos se presentan diversos enfoques desde diferentes perspectivas disciplinares, que aportan a la integralidad del trabajo y a plantear interrogantes que invitan a reflexionar sobre los futuros de uno de los sectores más importante del País en general y en La Pampa en particular. Los capítulos, que tienen una correspondencia con los ejes de los conversatorios, están organizados bajo dos premisas: de lo general a lo particular y del pasado hacia el futuro.
Los primeros capítulos abordan la evolución de las principales variables entre censos. Se centran en todos los subsectores que componen el agro argentino y hacen énfasis en una serie de evoluciones importantes.
Entre los resultados expuestos, se destaca la baja en las explotaciones censadas, el aumento de la concentración de la tierra, la baja proporcional de productores/as de pequeña escala, la disminución de personas que radican en el campo, el aumento de la figura del arrendamiento, los problemas con el recambio generacional y varias características de la gestión técnica, administrativa y comercial de las explotaciones.
En los capítulos siguientes se hace foco en varios subsectores de agro, centrando el análisis en agricultura, ganadería en general, ganadería porcina en particular, forestal y los bosques/montes naturales. Cada capítulo realiza una radiografía precisa de las principales evoluciones y contextualiza a La Pampa en el concierto nacional. Se generan interrogantes y aportes que son necesarios de capitalizar y canalizar hacia nuevas investigaciones, políticas públicas y estrategias privadas.
El tercer conjunto de capítulos aborda las características de gestión administrativa, técnica y comercial de las explotaciones agropecuarias argentinas y pampeanas. A partir de estas interpretaciones, y los aportes transversales que realizan cada uno de los capítulos, se proponen una serie de reflexiones futuras, en base a tendencias mundiales y sectoriales, y a apreciaciones cualitativas sobre los principales rasgos del sector, la alimentación y la tecnología. Se hace foco en los desafíos que presentan estas tendencias en instituciones como la Universidad y las Facultades de Agronomía en particular.
Cada capítulo aporta un grano de arena interpretativo que desnuda y pone en evidencia nuevas reflexiones, que deben ser transformadas, necesariamente, en acciones colectivas, públicas y privadas, que pongan en valor la sostenibilidad de largo plazo del agro argentino.
Desde el año 2002, el sector agropecuario argentino (y el pampeano) se ha concentrado, principalmente, en personas jurídicas.
Las explotaciones con más de 200 hectáreas han aumentado su participación, principalmente en los estratos más altos. Las explotaciones siguen estando en manos de productores/as como personas físicas, aunque ha aumentado considerablemente la participación de las personerías jurídicas.
En ese marco, las mujeres han ganado proporción entre censos, representando el 21% de los/as productores/as en 2018. El 16% de las/os productoras/es tiene menos de 39 años, y se sigue incrementando los mayores de 65 años (29%).
El 58% tiene estudios hasta primaria completa, y solo el 9% tiene estudios universitarios completos e incompletos. Solo el 34% se asesora profesional o técnicamente.
El arrendamiento de establecimientos es un mecanismo de producción en franca expansión. En tanto, uno de cada 4 residentes que vivían en el campo en 2002 ya no está, y también se han perdido puestos de trabajo formales por EAP: de 2,3 ocupados/EAP en 2002 a 1,7 en 2018. Uno de cada 5 EAPs contrata algún tipo de seguro y el 10.8% agrega valor en origen. El 34% de la superficie aplica algún tipo de agroquímico y solo el 14% gestiona los envases vacíos.
En La Pampa, los indicadores son muy parecidos a los nacionales. La concentración, el envejecimiento de las/os productoras/es, el nivel de asesoramiento y la participación de la mujer, siguen las mismas tendencias. La provincia se destaca por su perfil ganadero, con fuerte participación de hombre en la producción y en los puestos de trabajo, con menos puestos ocupados por EAP (1,3). El aumento de herramientas técnico-administrativas estuvo por encima del nivel nacional, el 51% realiza cálculos económicos y usa internet y computadoras. Por otro lado, en otros apartados tiene comportamientos por debajo del promedio nacional: sólo el 7,6% se asegura de alguna manera, el 1,8% de las EAPs agrega valor en origen, el 6,4% de las EAPs gestiona los envases vacíos de agroquímicos y menos del 7% realiza estudios del suelo.
Las tendencias del sector permiten empezar a construir escenarios posibles de mediano y largo plazo. Cada futuro posible trae consigo desafíos y oportunidades para el sector y las instituciones relacionadas.
En este marco, la UNLPam debe anticiparse a las grandes tendencias internacionales, nacionales y provinciales.
Para seguir analizando e indagando, invitamos a la lectura del libro (solicitar gratuitamente por correo a esa@agro.unlpam.edu.ar) y ver las conversaciones, disponibles en el canal de Youtube de la Facultad de Agronomía (https://www.youtube.com/channel/UCydL2-CSmlaqR1fswrZyW9g)
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