Lo hablaron en la reunión de ayer. Exigen legisladores con varios presidenciales. Piden reunión con Sanz.
Los radicales que no avalaron el acuerdo con Macri le exigirán a Ernesto Sanz que les permita colocar las listas de legisladores nacionales junto a varios presidenciales, bajo la amenaza de romper con el partido y presentarse con fuerzas propias.
“Ojo que si joden mucho todos tenemos nuestros partiditos provinciales y vamos por afuera”, se escuchó ayer en la sede de APL, donde se juntaron el jujeño Gerardo Morales, el formoseño Luis Naidenoff, el chaqueño Ángel Rozas, el tucumano José Cano, el pampeano Francisco Torroba y el bonaerense Ricardo Alfonsín, entre otros.
La convención radical que se reunió en Gualeguaychú definió una coalición con Mauricio Macri y habilitó sólo en casos excepcionales que algunos candidatos a gobernador puedan presentar boletas junto a Sergio Massa.
Pero sí restringió las listas de legisladores nacionales y de parlamentarios del Mercosur al acuerdo con el PRO. Sanz confiaba que la mayoría de los gobernadores desdoblarían la elección provincial pero hasta ahora sólo ocurrió en La Rioja.
En el resto, los candidatos radicales entienden que Massa podría armar su propia lista junto a peronistas díscolos y enterrar cualquier ilusión de destronar a gobernadores kirchneristas, como Eduardo Fellner (Jujuy), Gildo Insfrán (Formosa) y el senador Carlos Verna que vuelve a competir en La Pampa.
“A nosotros esto nos jode. ¿Cómo le pido a Massa que no me presente lista?”, increpó Morales en aquella noche de Gualeguaychú. Como adelantó LPO, ayer el jujeño impuso la idea de recordárselo a Sanz para exigirle que revea lo decidido en la Convención y designaron a Rozas como mensajero, por ser quien menos rompió vínculo con el mendocino.
Hasta ahora Macri no ha dado señales de bajar los candidatos locales. Mantiene a Manuel Avellaneda en Tucumán y presiona fuerte con Carlos Mac Allister en La Pampa. "En esas provincias se puede ganar o perder por un punto. Nos pueden joder mucho", repetían en APL.
Los rebeldes le explicarán a Sanz que en esos términos, o le garantizan compartir listas de legisladores con varios presidenciales o competerán por afuera, en provincias donde el PRO no obtenga bancas sin ellos con facilidad. No parece ser una amenaza que inquiete a Macri pero sí al presidente del Comité radical.
Los menos rupturistas fueron Alfonsín y Rozas, tanto que parecían tener un marco de acuerdo con Sanz. El chaqueño podría beneficiarse de la ambivalencia de la intendente de Resistencia Aída Ayala, quien ya se mostró con Macri y con Massa.
Alfonsín se conforma con la reelección de Miguel Bazze como diputado nacional y algunos nombres en las listas de legisladores provinciales. “El problema es que el PRO está duro. Quiere darte lo que tenes y nada más. Y en el 2011 nadie ganó muchas bancas”, le aclararon al hijo del ex presidente.
En la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, la UCR sólo renueva un senador sobre 23 y cuatro diputados sobre 46. El único compromiso de Sanz es mantener ese paquete.
Comentá la nota