Quiroga le regaló un elogio con perfume a candidatura –dijo que Sanz “es uno de los que tiene mayor volumen para ser candidato a presidente de la República”- y Sanz abundó en definiciones cuestionando al oficialismo nacional, que vinculó tanto con el Frente para la Victoria como con el MPN.

Inaudi durante su discurso en el acto de la UCR, este sábado (foto gentileza).

Aquí, algunas de las definiciones que brindó el senador mendocino:

Esta es una Argentina que debe acostumbrarse al diálogo, al respeto por la diversidad y al trabajo dentro de esa diversidad por un programa común. Hay que acostumbrarse a esto, y no porque hoy un Papa esté hablando de estas cosas.

En la provincia del Neuquén no hay equilibrios, porque los tres senadores son oficialistas, los tres senadores acompañan las políticas del Gobierno nacional, muchas de ellas lesivas a los intereses de la provincia del Neuquén.

Por ejemplo, todo lo que tiene que ver con la distribución de fondos, con el ejercicio del federalismo que en la Argentina se ha devaluado, porque muchos senadores dicen en campaña que quieren llegar al Congreso para defender la autonomía de las provincias, para defender el federalismo, para defender la coparticipación federal y la distribución de recursos equitativa, y cuando van y se sientan terminan votando cualquier cosa en contra de sus propias provincias.

Yo no creo que acá en Neuquén sean todos oficialistas al gobierno nacional. Por eso digo que la provincia del Neuquén merece tener representación equilibrada en el Senado.

Yo creo que en las elecciones de octubre habrá un gran ganador, y no hay que buscarlo con nombre y apellido en la persona de un opositor, ese gran ganador va a ser la sociedad argentina que va a ser capaz de ponerle un límite a un modelo autoritario y de perpetuación de poder que está viendo en las elecciones de octubre como el “todo o nada” para poder seguir adelante porque no tiene un plan b, el único plan que tienen es reformar la Constitución para ir por la re reelección.

Los neuquinos tienen que saber que si este Gobierno en octubre consiguiera dos tercios para reformar la Constitución, se pondrá en juego la letra de los principios federales que han sido concebidos en los últimos años con mucho esfuerzo. Y Neuquén no puede poner en riesgo, ante una reforma constitucional, sus recursos naturales, por ejemplo.

En mi provincia (Mendoza) como en Neuquén, hay una herida muy profunda por el tema de la empresa Vale. Un gobierno que no ha sabido contener la mayor inversión de los últimos años no puede venir hoy a pedirle el voto a los ciudadanos.

Las condiciones macroeconómicas en las que se desenvuelve la Argentina hoy, no son condiciones que contengan ni atraigan inversiones, donde hay un país con el 30% de inflación y un tipo de cambio desdoblado en la práctica. Acá hay muchas cosas ocultas, quien puede explicar realmente lo que pasó, las verdaderas razones de que se haya ido la empresa Vale.

Los problemas energéticos explotaron hace dos años y trajeron la novedad que todo lo que el Gobierno había dicho en los primeros años de su gestión eran mentira, había una mala praxis fenomenal, una mala gestión oculta debajo de la alfombra.

Nos fuimos directamente a la importación de combustible por valor hoy de más de 12 mil millones de dólares, en un país que había tenido al comienzo de la gestión de (Néstor) Kirchner el autoabastecimiento asegurado, y con un problema adicional. El petróleo y el gas que hoy estamos importando lo tenemos acá.