El gobernador aseguró que "esto no lo resuelven jueces, fiscales o esquemas segmentados". Reconoció estar "muy preocupado por la expansión de este fenómeno" en todo el país.
En el marco de su visita a diferentes localidades del sudoeste chaqueño, el gobernador Jorge Capitanich respondió a las declaraciones públicas del fiscal federal Patricio Sabadini sobre la situación del narcotráfico en la región.
"Tenemos una mesa de narcotráfico, integrada por fiscales y jueces federales, el procurador general de la provincia, fiscales de narcomenudeo, y organismos de las fuerzas de seguridad provinciales y nacionales, algo que surgió como iniciativa mía para regular el sistema de narcomenudeo", recordó Capitanich.
Sin embargo, agregó que "muchos, de las esferas federales no comparten ese criterio". "Nosotros tenemos reclamos de los vecinos que tienen que ver con distribuidores en kioscos, distintos lugares y tenemos que ir a esas madrigueras y destruirlas. Porque es un problema serio para la comunidad, que impacta en Argentina y la provincia del Chaco", indicó.
Capitanich aseguró que su intención es ir más allá de esta mesa interdisciplinaria. "Quiero discutir sobre el marco regulatorio de la Ley de Estupefacientes; que pueda funcionar sobre la base de otorgar, a laboratorios autorizados, con sistema de recetas, y cuando alguien se excede establecer un tratamiento de otras características", explicó
Lucha ineficaz
Capitanich citó como ejemplo, de intentos por la lucha contra el narcomenudeo la "Guerra contra las drogas", una política puesta en marcha en los 70, por parte del gobierno de Estados Unidos, a través del entonces presidente Richard Nixon.
El foco de aquella política que contó con una inversión de más de 71 millones de dólares, era erradicar el consumo, a través de trabajar con los adictos.
"Para lo único que sirvió fue para financiar ilegalmente a los servicios de inteligencia de los países imperialistas, generar acumulación de fondos excedentes en países centrales, para lavado de activos, y financiar un sistema de guerra ilegal", reflexionó Capitanich.
Capitanich respondió a Sabadini, y remarcó que la lucha contra el narcotráfico debe ser conjunta.
"El año pasado tuvimos cerca de 4200 procedimientos, más de 100 armas incautadas, es un problema que nos preocupa y ocupa.", insistió y agregó que la lucha contra el narcotráfico tiene tres vectores, prevención, erradicación y tratamiento, pero sobre esto último reconoció que "las capacidades son limitadas para atender tantos casos, y darle la oportunidad a las personas de tener un tratamiento, y reinsertarse socialmente, lo cual torna ineficaz todas las medidas que se han tomado"
"Esto es un tema que involucra a todas las partes. Esto no lo resuelven ni los fiscales, ni los jueces, ni declaraciones ampulosas ni esquemas de tratamientos segmentados. Estamos trabajando, pero estamos muy preocupados por lo significa la expansión de este fenómeno en todo el país."
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