Una iniciativa de ley presentada en la Asamblea Legislativa busca ponerle impuestos a bebidas envasadas con azúcar. La propuesta es impulsada por la diputada independiente Ivonne Acuña. 

En concreto, la legisladora que no asiste al Congreso desde finales de 2021 pretende que bebidas gaseosas, café y té ya preparados y energizantes, entre otros productos, sean gravados con ¢13,35 por unidad.

El impuesto deberá ajustarse anualmente de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor calculado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

La propuesta exceptuaría bebidas elaboradas a partir de zumos de fruta o de verdura naturales, leche o alternativas de la leche que no contengan azúcar añadida. 

Además, el texto en cuestión excluiría yogures bebibles, leches fermentadas bebibles, los productos para uso médico y las bebidas alcohólicas.

“La OMS y la Pan American Health Organization (PAHO) han expresado de manera concluyente que el consumo de bebidas con elevado contenido de azúcar es nocivo para la salud y brinda solo ‘calorías vacías’ que contribuyen al aumento de peso y al desequilibrio hormonal”, sostiene Acuña en la propuesta. 

“El aumento en el consumo de las bebidas azucaradas está relacionado con el incremento de la incidencia del síndrome metabólico (ligado al sobrepeso y la obesidad), así como resistencia a la insulina, causando diabetes mellitus tipo. Igualmente, su consumo se relaciona con otros padecimientos como enfermedades cardiacas y cáncer”, agrega la legisladora. 

Del mismo modo, Acuña sostiene que el proyecto de ley ayudaría a las finanzas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), puesto que dicha entidad anualmente destina ¢167 mil millones en atención integral de pacientes con diabetes, males cardiacos y cáncer.

¿Y LA PLATA?

La pregunta necesaria al respecto sería: ¿En qué se utilizarían los recursos recaudados?

Según Acuña, el 80% de lo obtenido en impuestos se destinará a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para amortizar a la deuda del Estado con dicha institución. 

Por otra parte, el 10% de los recursos irá al Ministerio de Salud, para la investigación y acciones de prevención del abuso de consumo de bebidas envasadas con azúcar añadida y para incentivar hábitos nutricionales saludables. 

Finalmente, la diputada precisa que el restante 10% será para la Dirección Nacional de Desarrollo de la Comunidad (Dinadeco), con el fin de que los destine a las Asociaciones de Desarrollo Integral (ADI) y que presenten proyectos de infraestructura de agua potable en centros educativos y comunidades, instauración de huertas escolares y alimentación con hortalizas.

Productos que se pretende gravar

Refrescos o sodas: bebidas sin alcohol de distintos sabores, con o sin gas, preparadas comercialmente y que se venden en botellas, cajas o latas, así como las que se suministran al consumidor mediante un surtidor. 

Bebidas de néctar de frutas y zumos de frutas. 

Bebidas deportivas diseñadas para ayudar a los atletas en la rehidratación, así como en la reposición de los electrolitos, el azúcar y otros nutrientes. 

Té y café preparados. 

Bebidas energéticas, incluidas las carbonatadas 

Leches endulzadas, bebidas alternativas de la leche, batidos y bebidas de leche con zumo de fruta. 

Bebidas vegetales con azúcar.