La designación del nuevo jefe de la Unión Industrial Argentina se aceleró para lograr que se concrete antes de las elecciones nacionales.
Con la promesa de evitar definiciones electorales y mantenerse al margen de casi todos los debates, la nueva conducción de la UIA, que tiene al representante de la multinacional Arcor Adrián Kaufmann como máxima referencia, buscará conseguir la bendición del candidato del FpV, Daniel Scioli, y sortear las fuertes críticas que surgieron de empresarios ligados al kirchnerismo.
Sin embargo, un grupo de empresarios del Grupo Industriales prometió instalar su rechazo para enturbiar la sucesión e incomodar a una de las más grandes empresas del país en su relación con el Gobierno nacional y con candidato que lidera las encuestas. De hecho, en la vereda de la lista de Celeste y Blanca también expresaron su desacuerdo con la llegada de Kaufmann aunque evitarán entrometerse en el debate interno.
Cuentan que un joven jefe de diseño publicitario de la empresa alimenticia, propiedad de Luis Pagani, fue el encargado de designar el logo en una de las lanchas que utilizaba hace más de 20 años el entonces motonauta y ahora gobernador Scioli. “Nos vino a visitar a nuestra planta de Salto hace dos meses. La relación es excelente”, afirmó, a modo de aclaración, un directivo de Arcor consultado por BAE Negocios.
Kaufmann buscará tender puentes con el oficialismo para buscar aclarar que su llegada a la UIA no será un signo de oposición. “Desde que se produzca la asunción y hasta las elecciones generales, buscaremos tener un perfil bajo para no quedar en el medio del debate electoral”, aclaró una fuente calificada del sector de Industriales, inmersa en el acuerdo.
En esa línea, la lista Celeste y Blanca avanzó en los nombres que ocuparán las vicepresidencias que tienen a su favor, según señala el acuerdo de alternancia que rige en la UIA. Fuentes consultadas por este diario confiaron que Daniel Funes de Rioja, de la alimenticia Copal, sería el vice primero; Cristiano Ratazzi, de Fiat, el tercero; Daniel Acevedo de Aceitera General Deheza retornaría a la mesa chica en la vice quinta; mientras que en la séptima estaría Rubén Abete. En la Tesorería quedaría Jorge Sorabilla.
Existe, de todos modos, un punto fuerte de tensión porque el actual vicepresidente segundo y quien pudo ser presidente de la UIA dos años atrás, José Urtubey, quedaría afuera del armado más chico. El dueño de Celulosa Argentina, uno de los industriales más elogiados por Scioli, sería perjudicado en el nuevo armado y desde el sciolismo dicen que se trata de una “mala señal para los tiempos que vienen”.
Así, la Presidencia, la Vicepresidencia primera y la Tesorería quedarían en manos de empresas alimenticias. “El negocio de la alimentación es agro pastoril, que pide apertura en el mundo para vender su mercadería”, se quejó un jefe empresario que se encuentra en medio de las negociaciones. Con este esquema, el acuerdo entró en territorio pantanoso.
Provincias del NOA rechazan el acuerdo
Un grupo de entidades industriales de provincias del Norte, encabezadas por la UIA de Chaco, emitirán un comunicado conjunto en donde expresarán su rechazo al acuerdo para designar al gerente de Relaciones Institucionales de Arcor, Adrián Kaufmann.
“Estamos muy sorprendidos dirigentes del norte del país en cómo se manejan los dirigentes de la UIA sin importarle la autonomía de las UIA provinciales”, enfatizó el presidente de la UICh, Andrés Irigoyen, en declaraciones a BAE Negocios. En principio, se sumarán Corrientes, Misiones y Formosa aunque el momento de la difusión del comunicado podría incorporarse dos distritos más.
Los dirigentes industriales del NOA se quejan por “discriminación” y lo expresarán en el documento que tendrá como título: “Sin el norte argentino, no hay federalismo”. No estará el nombre de Kaufmann.
Esas resistencias dentro de Industriales tienen, sin embargo, un peso específico que cuestionan los acuerdistas por su relativo peso. Sucede que las “discusiones se van dando por los que tienen más representatividad” y los reclamos llegaron desde espacios que sufrieron fisuras internas. “Muchas de las regionales que no están de acuerdo, hacen los planteos porque no tienen derecho a votos porque no pagan las cuotas de la UIA”, enfatizó una fuente de la entidad industrial.
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