La presidenta Cristina Fernández de Kirchner designó por decreto 69 jueces, conjueces y defensores. Entre los nombramientos hay 29 fiscales, varios de los cuales tienen pasado polémico, causas inconclusas y hasta intervenciones en problemas de divas del espectáculo.

El primero de ellos, Carlos Alberto Vasser, fue secretario del fiscal Guillermo Marijuán y estuvo involucrado en la causa que involucra a Lázaro Báez, constructor K. Allí tuvo un rol clave para dejar en claro que la imputación por lavado de dinerosolo apuntaba a Leandro Fariña y Federico Elaskar. Se lo hizo saber al fiscal antilavado, Carlos Gonella.

Polémico pasado tiene María Josefina Minatta. Ganó conocimiento público en 2014 cuando participó del escrache al exministro de Economía Domingo Cavallo, mientras el economista disertaba en la Universidad Católica Argentina. Su fama en el riñón de la militancia kirchnerista fue tal que siete meses después está a punto de convertirse en fiscal de un juzgado que todavía no funciona.

Por su parte, Fernando Alcaraz, miembro de Justicia Legítima, tiene en Mendoza un pariente camarista: su cuñado es juez del Segundo Tribunal Oral de Mendoza, Héctor Cortés.

Intercedió en la causa del supuesto testaferro del vicepresidente, Amado Boudou,Alejandro Vanderboele y en febrero de este año le negó la excarcelación en esa provincia.

Otros casos llamaticos son el de María Marta Schiann, quien en 2011 trabajó en la causa de drogas de Adolfo Jelinek, hermano de Karina Jelinek. Por ese entonces era fiscal federal subrogante ante Tribunal Oral Federal 1 de Córdoba. Aquella vez se opuso a una suspención de juicio a prueba que, por tercera vez, pedían para frenar el juicio que venía desde fines de diciembre de 2009 contra  él, quien fue sorprendido en Villa María cuando venía desde Córdoba Capital con un kilo de cocaína en un bolso.

Juan Pablo Curi (Presidente Tribunal Criminal N°1) es de Dolores y participó de numerosas actividades vinculadas a los Derechos Humanos. “Cuando se baja un cuadro y cuando la Justicia avanza y condena existe la armonía necesaria entre poder político y poder punitivo”, dijo en 2013 durante el acto homenaje a los desaparecidos de la última dictadura militar. También participó de actividades de ese tenor que realizó La Cámpora.

Entre los fiscales está también Santiago Marquevich, hijo del exjuez Roberto Marquevich, destituido tras ordenar la detención de la presidenta del Grupo Clarín, Ernestina Herrera de Noble. Hasta el nombramiento, se desempeñó en la fiscalía de Morón y también fue fiscal ad hoc en Salta de la Unidad de Apoyo Fiscal para la Investigación de Delitos Complejos y del Crimen Organizado.

Marcelo Gustavo Agüero Vera, fue fiscal del juicio del caso por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia y pidió la pena de ocho años para Carlos Menem por contrabando.

Franco Eduardo Picardi fue Subsecretario de Relaciones con el Poder Judicial y había sido secretario de una fiscalía federal. También asistió al secretario de Justicia, Julián Álvarez. En otra fiscalía quedó al frente María Paloma Ochoa, integrante del Programa sobre Políticas de Género de la Procelac y miembra de Justicia Legítima.

Santiago Vismara, ahora reciente fiscal nombrado, participaba en la fiscalía correccional N°6 cuando solicitó revocar el sobreseimiento de Nazarena Vélez en la causa que la ex conductora infantil, Flavia Palmiero, le inició en su contra luego de que la productora teatral la difamara y agrediera a través diferentes medios de comunicación.