El presidente electo Javier Milei tomará juramento por la tarde del domingo a su gabinete de ministros.

Nicolás Posse – Jefe de Gabinete

Será uno de los funcionarios clave de Javier Milei desde la jefatura de Gabinete. Toda su carrera transcurrió en el sector privado. Es ingeniero industrial recibido en el ITBA y tiene estudios de posgrado en la universidad de Cambridge. Quienes lo conocen destacan su bajo perfil.

Conoce al líder libertario desde hace 15 años. Como gran parte de los futuros funcionarios se encontró con el líder libertario en Aeropuertos Argentina 2000, el enorme semillero de Eduardo Eurnekián, uno de los empresarios más poderosos del país.

Posse pasó por varias de las principales compañías nacionales. Comenzó en Molinos Río de la Plata, luego formó parte de Telecom e incluso trabajó en Red Bull, conocida por fabricar bebidas energizantes.

«Es una persona de una inteligencia extraordinaria, híper honesto, con una capacidad de trabajo furiosa y, sobre todas las cosas, muy ordenado», dijo sobre él Milei. Acompañó al presidente en su primera gira por los Estados Unidos luego de ganar el balotaje y fue clave en la última parte de la campaña. Coordinó los equipos técnicos y tuvo un rol decisivo en la conformación del nuevo gabinete.

Guillermo Francos – Ministro del Interior

Todavía figura como director de la Corporación América en su perfil de Linkedin. Será otra de las piezas claves del gobierno libertario y tendrá a su cargo la relación con las provincias como ministro del Interior. Es uno de los cerebros políticos de Javier Milei. Su participación fue decisiva para que el libertario ganara el balotaje y para mantener a raya al macrismo de los principales puestos.

Fue concejal porteño a los 25 años y desde ese momento su carrera alternó entre el sector público y el privado. Gustavo Béliz lo incorporó al partido Nueva Dirigencia, fue electo diputado con Domingo Cavallo y renunció a su banca tras el escándalo de las coimas en el Senado. «Cansancio moral», fue su explicación para abandonar el Congreso.

Desde 2002 se sumó a Corporación América. Su paso por la empresa de Eurnekián fue interrumpido para regresar al sector público a pedido de Daniel Scioli. En 2007 desembarcó como presidente del Banco Provincia y luego trabajó en la fallida campaña presidencial del exmotonauta. En ese momento conoció a Milei y años después de convirtió en uno de sus principales laderos.

Diana Mondino – Relaciones Exteriores

La canciller de Javier Milei transpira menemismo. Es directora de Asuntos Institucionales del CEMA, el think tank que proveyó a Carlos Menem de sus principales cerebros económicos. Además, está casada con Eugenio Pendás, exsecretario de Obras Públicas durante la década del ’90. Su hermano Eduardo estuvo procesado por el megacanje en la época de Fernando De la Rúa.

Diana es heredera de Víctor Mondino, quien fundó el Banco Roela y durante varios años formó parte de su directorio. También pasó por algunas de las principales empresas argentinas, como Pampa Energía, Edenor, Banco Supervielle, Bodegas Valentín Bianchi, Loma Negra.

Después de varios traspiés de La Libertad Avanza, durante el último tramo de la campaña libertaria fue elegida como una de las voceras. En una de sus primeras apariciones comparó a la homosexualidad con tener piojos y fue una abonada a las declaraciones estridentes. En la última semana anunció que la Argentina no ingresaría a los BRICS y pidió que las empresas «compren generadores», porque la red energética no dará abasto por el crecimiento económico.

Mariano Cúneo Libarona – Ministro de Justicia

Foto: Enrique Cabrera / Télam

El ministro de Justicia tuvo su pico de fama en la década del ’90 como uno de los partícipes del escándalo del jarrón de Guillermo Cóppola. El nombre del entonces joven abogado se mezcló con el de Natalia Denegri y Samantha Farjat.

Parte de una conocida familia de abogados, Cúneo Libarona es tal vez el penalista más importante del país. Como varios de sus compañeros de Gabinete, pertenece a la Corporación América.

Con tan sólo 27 años fue el abogado de Amira Yoma durante el «Yomagate», uno de los casos más sonados de corrupción durante el menemismo. Como casi siempre en su vida, Cúneo Libarona jugó al límite. Tuvo una hija con Lourdes Di Natale, que se desempeñaba como secretaria de Emir Yoma, otro de los defendidos de Cúneo, que también fue acusado en la causa por tráfico de armas a Ecuador. Di Natale denunció a su exjefe y en 2003 fue encontrada muerta tras caer de un décimo piso.

El nombre del ministro de Justicia también apareció en la causa AMIA, como defensor del excomisario Juan José Ribelli. Allí Cúneo Libarona terminó detenido, acusado por el juez de robarse un video que incriminaba a su cliente.

Luis Caputo – Ministro de Economía

Foto: Eitan Abramovich / AFP

Fue definido por Mauricio Macri como «el Messi de las finanzas». Poco después de la elogiosa frase, el funcionario sería uno de los responsables de estrellar la economía argentina desde el Banco Central. Antes, como ministro de Finanzas había conseguido uno de sus principales hits con el Bono centenario.

De aceitados contactos con Wall Street, en la capital financiera del mundo aún perdura la bronca con «Toto» por las millonarias pérdidas que causaron sus decisiones.

Después de denostarlo en público, Javier Milei lo eligió para liderar la cartera más caliente de todo el gobierno. «Necesito alguien que tenga una muñeca financiera experta y no hay mayor experto financiero en la Argentina que Luis Caputo», dijo el presidente tras designarlo a la cabeza de Economía.

Fue uno de los gestores, junto a Nicolás Dujovne, del multimillonario préstamo del FMI que todavía condiciona el presente de la Argentina. Más allá de la bronca de los fondos de inversiones, los bancos festejan las jugosas comisiones que recibirán en los próximos meses.

Patricia Bullrich – Ministra de Seguridad

Foto: AFP

Refleja tal vez una de las mejores definiciones de la casta política denostada por Javier Milei. La futura ministra de Seguridad pasó por Montoneros, fue la líder de la Juventud Peronista y luego desembarcó en el gobierno de Fernando De la Rúa. El recorte del 13% a los jubilados fue una de sus medidas más recordadas como ministra de Trabajo del gobierno de la Alianza.

De la mano de Elisa Carrió consiguió mantenerse varios períodos como diputada hasta que pasó a integrar el PRO. Con el macrismo volvió a los primeros planos de la política.

Se hizo cargo del Ministerio de Seguridad durante la presidencia de Mauricio Macri y defendió a la Gendarmería y a la Prefectura tras los asesinatos de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel. Tras el fin del gobierno, llegó a la presidencia del PRO, desde donde reestructuró su carrera.

Las marchas durante la pandemia la volvieron uno de los referentes de los «halcones» y con el apoyo de Macri logró vencer a Horacio Rodríguez Larreta.

Una desastrosa campaña electoral la dejó fuera del balotaje y enemistada con Macri. Pero Bullrich sobrevivió una vez más.

Luis Petri – Ministro de Defensa

Será uno de los integrantes más jóvenes del Gabinete de Javier Milei. «No sabe distinguir un tanque de un calefón», lo chuceó un conocido periodista antes de que asumiera en el Ministerio de Defensa.

El exdiputado de la UCR fue de los últimos confirmados del gabinete libertario, a donde llegó por gestiones de su excompañera de fórmula de Patricia Bullrich. El llamamiento a votar a Milei hizo que afiliados del radicalismo pidieran expulsarlo del partido, pero Petri no se inmutó.

Su 2023 no había comenzado de la mejor manera: fue derrotado por Alfredo Cornejo en las primarias para la gobernación de Mendoza. Sin embargo, un resultado mucho más ajustado de lo esperado hizo que Bullrich lo llevara como compañero de fórmula.

Tuvo duros enfrentamientos en los debates presidenciales con Victoria Villarruel por cuestiones de seguridad y parecía que la derrota en las elecciones generales pondría en el freezer su carrera política. Tuvo revancha rápido: ocupará uno de los puestos que añoraba la vicepresidenta.

Sandra Petovello – Ministra de Capital Humano

Fue una de las mayores sorpresas que deparó el Gabinete de Javier Milei. Tendrá a cargo el Ministerio de Capital Humano y manejará uno de los principales presupuestos del gobierno. Tendrá a su cargo las áreas de Educación, Trabajo y Desarrollo Social, tal vez las áreas más sensibles de la administración nacional.

Estudió Periodismo en la Universidad de Belgrano y Ciencias de la Familia en la Universidad Austral y su currículum no se parece en nada al de sus compañeros en el gabinete. No tiene ninguna experiencia en gestión pública, pero trabajó como productora de varios programas periodísticos y en investigaciones académicas.

Tiene línea directa con Javier Milei y poder de decisión: fue quien vetó a Carolina Píparo de la ANSES. Vicepresidenta de la UCeDé, dio el visto bueno para que Educación, Empleo, Niñez y Familia, y Salud se convitieran en secretarías. «Yo funciono como una coordinadora, porque vos imaginate que yo no puedo tener experticia en estas cuatro áreas. Yo busco los problemas, los traigo y los reparto en gente altamente capacitada», explicó.

Guillermo Ferraro – Ministro de Infraestructura

Guillermo Ferraro será otro de los «súperministros» del Gabinete libertario. Como titular de Infraestructura concentrará cinco áreas clave de la gestión: Transporte, Obras Públicas, Minería, Energía y Comunicaciones. Las promesas públicas de Javier Milei en campaña lo transformarán en el «ministro de privatizaciones».

Fue quien se encargó de coordinar la fiscalización libertaria hasta el balotaje. Tendrá una posición peculiar: deberá gestionar la obra pública de un gobierno que anunció que terminaría con la obra pública.

A fines de los ’80 fue funcionario de Antonio Cafiero en la provincia de Buenos Aires y volvió a la función pública de la mano de Eduardo Duhalde. Fue director del Banco de Entre Ríos entre 2003 y 2005, y del Banco Bisel entre 2003 y 2007. En la última década fue uno de los directores de la consultura KPMG.

«El Estado tiene que reducir su participación en la economía para dar espacio al sector privado. Vamos a tratar de orientar, estimular e incentivar al sector privado para su inversión», dijo Ferraro antes de asumir.

Mario Russo – Ministro de Salud

Se trata de un cardiólogo clínico con vasta experiencia en el ambiente de la salud, pero también en la arena política, donde llegó a engrosar las filas de gobiernos tanto peronistas, como macristas. Durante su paso por Morón, cosechó un curioso antecedente antiderechos cuando en una sala periférica les exigieron a los médicos que denuncien a las pacientes ante la sospecha de haber cometido un aborto.

Entre 2000 y 2004, Russo fue coordinador del Servicio de Trasplante Cardiopulmonar Pediátrico en el Hospital Italiano, mientras que a partir de 2001 estuvo a cargo de la Unidad Coronaria de Fleni. Al mismo tiempo, fue clave en el Hospital Polo Sanitario Malvinas Argentinas para poner en marcha el Servicio de Cardiología. Y fue secretario de Salud de los municipios de San Miguel, entre 2009 y 2015; y de Morón, entre 2015 y 2017, para luego convertirse en secretario de Gobierno del entonces intendente Ramiro Tagliaferro.

También fue subsecretario de Coordinación de Políticas Sanitarias del Ministerio de Salud bonaerense en tiempos María Eugenia Vidal. Desde enero de 2020 hasta mediados del año pasado fue director de Asuntos Gubernamentales en AySA, durante la gestión de Malena Galmarini.

Santiago Bausili – Banco Central

Socio de Toto Caputo, ex Deutsche bank y exsecretario de finanzas. Estuvo procesado pero la Justicia limpió su situación.

Florencia Misrahi – AFIP

Especialista en temas impositivos y aduaneros. Se desempeñó en la multinacional cerealera Cargill.

Horacio Marín – YPF

Expresidente de exploración y Producción de Tecpetrol. Ingeniero químico recibido en La Plata con estudios en Stanford y Texas.

Daniel Tillard – Banco Nación

Alfil de Schiaretti, economista, egresado de la Universidad de Córdoba, ocupó la presidencia del Banco de Córdoba por ocho años.

Osvaldo Giordano – Anses

También schiarettista. Exsecretario de Previsión Social de Córdoba, y hasta ahora ministro de Finanzas provincial.