Miguel Saiz fue el gran derrotado de la jornada, y su partido se quedó sin chances ni bancas en el Congreso Nacional. El 10 de diciembre Hugo Castañón y Noemí Sosa -quien asumió tras el fallecimiento de Pablo Verani- serán los últimos referentes de la fuerza con representación.

En todo Río Negro la paliza fue contundente, tan contundente que Saiz sacó incluso menos votos que en las PASO. El triunfo se alejó de la UCR y sólo en parajes como Mencué, anoche lograba mantener los escurridizos votos, según destacaban algunos actores de la campaña.

Sobre el filo de las 21, tras conocer la tendencia irreversible que los situaba en un tercer puesto, Miguel Saiz -cobijado antes tras una fina bandera (tipo sábana) que lo separaba de sus correligionarios- decidió bajar las persianas y retirarse sin hacer declaraciones. Antes sí llamó al senador Miguel Pichetto para felicitarlo por su triunfo y más tarde también saludó a Magdalena Odarda.

"Fue un golpe fuerte, evidentemente los conflictos al interior del partido, también se notaron", se lamentaron colaboradores.

"El FpV está instalado y bueno..., evidentemente, sea como sea la gente los vota. Aunque lleve a la cabeza una 'porta-apellido' sin carrera ni conocimientos en política", deslizaron por lo bajo, con bronca contenida.

"Estamos shokeados"

María Inés García, presidenta del partido a nivel provincial, lamentó la derrota y reconoció que de aquí en más la fuerza política deberá "hacer un análisis hacia el interior" para "corregir errores".

"Tenemos que esperar para hacer un análisis profundo, estamos shockeados...", admitió la referente radical. "La tendencia es irreversible y perderíamos las dos representaciones que tenemos", lamentó.

"El FpV está consolidado en la provincia, Magdalena (Odarda) ha estado capitalizando el rol de la oposición y nosotros tendremos que analizar al interior del partido qué fue lo que pasó", consideró García, quien negó que el rol de Saiz como candidato pudiera haber influido en la fuga de votos.