Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo junto a la Municipalidad de Avellaneda y la Ciudad de Buenos Aires
A lo largo de ambas márgenes del Riachuelo, en el espacio conocido como Camino de Sirga, la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) impulsó la construcción de diez nodos, que consisten en zonas acondicionadas para actividades recreativas, lúdicas y deportivas.
La iniciativa, que inició en la Municipalidad de Avellaneda y en la Ciudad de Buenos Aires, se espera extender a nuevos distritos con el objetivo de poner en valor el espacio público, promover el vínculo de la comunidad con su río y mejorar la calidad de vida de la gente.
Estas obras de mejoramiento cuentan con juegos infantiles, bancos, mesas y equipos para hacer gimnasia. Y finalizarán con la incorporación de vegetación nativa del Riachuelo.
“Para consolidar el saneamiento ambiental es fundamental recuperar el vínculo con el río y los arroyos, que vuelvan a ser valorados y cuidado por los propios habitantes. Las acciones de limpieza, control industrial y prevención que realizamos todos los días hacen posible avanzar también con este tipo de obras”, destacó Martín Sabbatella como presidente de ACUMAR.
Los trabajos implicaron una inversión de ACUMAR por más de 100 millones de pesos, $53.354.374 se destinaron a los cuatro nodos de Avellaneda y $54.324.465 a los seis de Ciudad de Buenos Aires.
El Camino de Sirga es la franja costera que, históricamente, debía quedar liberada para permitir que se pudiera remontar el río prescindiendo de los medios de impulsión propios de las embarcaciones, a contra corriente del curso de agua. Esto se lograba mediante el uso de tracción a sangre (usualmente grupos de personas o yuntas de bueyes) a través de cabos o sirgas, de ahí su nombre.
En la actualidad, el concepto hace referencia a las franjas de 35 metros de ambas riberas del Riachuelo, que deben permanecer liberadas y ser de acceso público, de acuerdo al Código Civil y tal como fue solicitado por la Justicia a ACUMAR.
Comentá la nota