El máximo dirigente de Unión Popular en Misiones, Ramón Puerta brindó una entrevista a M4 en la que habló de diversos temas ligados al contexto político local y nacional, la independencia de poderes, la situación económica, las elecciones en 2015 y, también tocó el tema de las represas, en la semana en la que se lleva adelante la Consulta Popular sobre las Represas. Sobre este crucial tema, el exgobernador se mostró claramente contrario a las represas en zonas tropicales y subtropicales, al tiempo que recordó que durante su gobierno convocó al plebiscito vinculante por el proyecto de embalse en Corpus, y votó públicamente en contra de esa impopular iniciativa. Además, resaltando la importancia de la iniciativa que se inició este lunes, aclaró que si estuviera en el gobierno, la misma no sería necesaria, porque ya habría convocado al referéndum vinculante previsto por la normativa vigente. “¿Por qué si (está la Ley IV nro. 56, de Soberanía Energética), no convocaron al plebiscito? Porque los muchachos (renovadores) ya tienen negocios con las represas”, disparó.

“Siempre fui peronista y voy a seguir siéndolo, pero frentista, republicano y democrático; de los que escuchan a los que piensan distinto”, aseguró Puerta, luego de hacer una breve reseña de su trayectoria en la militancia política. “El kirchnerismo no sólo destruyó nuestro partido (el Justicialista), sino que dejó cojo al radicalismo y ni que decir a prestigiosas entidades (de defensa) de los Derechos Humanos. El daño que hizo el kirchnerismo con la transversalidad, es muy parecido al que estamos a punto de hacer, desde la política, con este menjunje, donde cualquiera va para cualquier lado, haya o no coincidencia ideológica”, advirtió Puerta, en relación a algunas alianzas de corte netamente electoralista como la del PRO con la UCR.

“Busco afirmarme en el peronismo, recuperar el partido para los peronistas y desde ahí, conformar un frente que nos tiene que dar una alternativa distinta a la que estamos viviendo”, definió el apostoleño.

El personalismo y la alianza del PRO con el radicalismo

El exgobernador advirtió los problemas del personalismo en el sistema político argentino, y consideró que “vivimos en una sociedad harta de la política”, y que al mismo tiempo, piensa que una persona va a enderezar el rumbo del país. Puerta llamó a “abrir los ojos, porque siempre que pusimos los fichas en una sola persona, ello siempre terminó en la desilusión y el desencanto, porque esa persona, no pudo resolver los temas.” Ante la repregunta que apuntaba al carácter personalista del movimiento peronista, Puerta aclaró que “antes de Perón hubo un (Hipólito) Yrigoyen (en la UCR), y antes de eso un (Julio) Roca y antes un Rosas. Es algo propio de la vida en sociedad, buscar que una persona nos resuelva los temas. Y también está la persona que quiere resolver los temas. Antes se hablaba de los caudillos, ahora de los señores feudales. Es lo que la democracia reemplaza con el sistema institucional (republicano) de los tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial)”, reflexionó Puerta, quien advirtió que en el país y la provincia, “no estamos entendiendo, que la división de poderes sólo funciona si funcionan los partidos. Y estos a su vez, si estamos imbuidos de un espíritu democrático”, apuntó.

Tomando como ejemplo las presiones a comerciantes de Posadas, que sufren inspecciones fiscales por haber protagonizado una masiva protesta contra los “asfixiantes” impuestos en Misiones, Puerta aseguró que se siente preocupado porque el espíritu democrático “está siendo reemplazado por la prepotencia kirchnerista, o la prepotencia en cada provincia y en cada pueblo, del caudillo de turno”, manifestó.

Ante la consulta sobre los motivos que permitieron que el radicalismo se reconstruya más rápidamente que el justicialismo, Puerta explicó que ello se debe, en parte, a que se trata de un partido de los sectores medios. Pero en el caso del PJ, “ese partido de las grandes mayorías oprimidas, hoy tiene más problemas porque no se está reconstruyendo. Nos robaron la sigla, nuestra casa –está en manos del kirhnerismo- y con los planes sociales tienen apretadas a esas grandes mayorías que no tienen la posibilidad de opinar como las clases medias. El radicalismo se ha reconstruido más rápido”, admitió el dirigente, quien aclaró que al justicialismo le toca la ardua tarea de reparar los daños de la “Década Perdida”. “Hoy la pobreza es mayor al 50%, y ya nadie lo discute. Lo dice la Iglesia, los organismos internacionales y cualquiera de nosotros que salga por la calle y mire un poco, (la realidad)”, enfatizó.

Cuestionamientos a la política fiscal de la Renovación

Contra la política fiscal del gobierno renovador, Puerta resaltó que su gobierno se caracterizó por la “eliminación de impuestos al productor y al industrial. Y por la morigeración de los impuestos al sector terciario, los comerciantes. Incluso, enormes quitas en los aportes patronales. Hoy, por cada trabajador, el empresario paga dos sueldos”, advirtió Puerta, en tono crítico a la política de los aportes, que según él, implcia que por cada salario en blanco, el Estado se queda con el equivalente a otro sueldo. “En mi época, con la quita del 75% de los aportes, cada cinco trabajadores, (los impuestos laborales sumaban un salario), se aportaba el 20% de lo que hoy se aporta”, comentó.

“La presión fiscal es insoportable”, opinó Puerta, para quien, con la llamada “aduana paralela” del gobierno provincial –es decir, el pago anticipado del impuesto a los ingresos brutos-, se paga una aduana mayor que la vigente con los países vecinos.

Sin embargo, Puerta aclaró que su propuesta no implica la eliminación de los impuestos, sino el fortalecimiento del sector privado. “Yo manejé una provincia que recibí con 35 mil empleados públicos y la devolví con 30 mil. El sector privado había crecido enormemente; había más empleados en el sector privado que en el público. Hoy tenés un Estado que más que duplicó sus empleados y un sector privado que se fue de misiones”, subrayó. Al respecto sostuvo que los aserraderos se mudaron a otras provincias y, “afortunadamente, el sector yerbatero, gracias a la escasez de materia prima, se viene salvando. Pero está por estallar porque este gobierno no se pone los pantalones y defiende el precio justo ante el gobierno nacional”, cuestionó.

La necesidad de terminar con la "cultura de la corrupción"

Consultado sobre lo que haría si volviera a ser gobernador, Puerta aseguró que “hay que eliminar impuestos, sino, la gente no puede trabajar. Que vuelva a haber tres poderes independiente, me comprometo a lo mismo. Y que no haya impunidad”, resaltó el exsenador, quien apuntó que en sus gobiernos o en los de sus antecesores, Ricardo Barrios Arrecha y Julio Humada, los funcionarios y gobernantes no podían hacer ostentación de riquezas conseguidas gracias a sus cargos públicos, como sucede en la actualidad. “Ahora pueden mostrar sus mansiones y su crecimiento patrimonial, porque controlan los tres poderes y porque hay una sociedad que no se rebela”, consignó.

El exdiputado nacional llamó a que “terminemos con esta cultura de la corrupción” volviendo a “los valores; con independencia de poderes” y con funcionarios y mandatarios que puedan mostrar su patrimonio al dejar la función. “Yo llegué con más patrimonio que con el que me fui. Y otros gobernadores pasaron por la misma situación. No me consta que después del 2001 esto siga ocurriendo”, aseguró.

Volviendo a lo que sería su modelo de gestión, Puerta se distanció del plan estatista y del privatizador, argumentando que el Estado tiene un “rol indelegable” y el sector privado “tiene la obligación de garantizar el crecimiento”. “No se puede confundir el Estado con el boliche y la plata que se hace con el Estado”, consideró, advirtiendo que muchos defienden la estatización de empresas, “porque se ponen a hacer negocios” con los fondos públicos. “Cuando pierden plata, pierde el Estado y cuando ganan, se la quedan ellos. Hemos confundido el rol del Estado y el rol del privado”, aseguró.

El rechazo a las represas en Misiones

Sobre la Consulta Popular que llevan adelante 40 organizaciones sociales y sindicales que integran la Mesa por el No a las Represas, Puerta expresó: “voy a votar en Apóstoles, donde no alcanzaron las urnas. Gente de Unión Popular ha reforzado el trabajo. No voy a decir que esta consulta me tiene como protagonista. He apoyado y con Unión Popular fuimos el primer partido, ya hace un par de años, que recorrimos pueblo por pueblo, para explicar por qué nos oponemos a las represas”, subrayó.

“Valoro la iniciativa de sectores ecologistas, pero si yo fuera gobernador, no hacía falta este esfuerzo. Yo convoqué al plebiscito de Corpus y el Estado dio garantías. Y como gobernador no me metí ni por el ‘sí’ ni por el ‘no’ (al proyecto del embalse en esa ciudad) Voté por el ‘no’ y lo hice público, pero el Estado garantizó la transparencia de esos comicios”, enfatizó. Y desnudando los intereses de los funcionarios renovadores, Puerta se preguntó: “¿Por qué, si es ley (se refiere a la Ley IV – nro. 56/2011) no hizo esto el Estado? Porque tienen negocios los muchachos que se encargaron de denunciar este formidable esfuerzo para que 100, 150 o 200 mil misioneros, digan nuevamente que ‘no’ a las represas. Que es un sentimiento unánime”, aseguró.

Sobre este punto es de destacar que, según fuentes de este medio, el propio gobernador de Misiones, Maurice Closs, está adquiriendo terrenos en la zona de Corpus, que se inundaría si se construye un embalse, como lo tienen proyectado el gobierno nacional y el provincial. Como es sabido, si el Estado impulsa esa iniciativa, indemnizará a los tenedores de tierras que vayan a ser anegadas, con lo que Closs –a través de sus testaferros- sería uno de los principales beneficiados con una represa en la zona –recuérdese que es un proyecto ya rechazado en el plebiscito vinculante de 1996. Idéntica situación estaría ocurriendo en tierras que serían inundadas si se construye la represa de Garabí y Panambí en el río Uruguay –esto explicaría el motivo por el cual, el gobierno provincial se niega a convocar al referéndum vinculante previsto en el articulado de la ley 56/2011.

En declaraciones más ligadas a la cuestión político-partidaria, el exgobernador advirtió sobre la necesidad de coherencia de algunos dirigentes misioneros, que aquí se muestran contrarios a las represas, pero apoyan a un gobierno nacional pro-represas. “Pido coherencia para garantizar un rumbo”, apuntó, sin mencionar a las fuerzas políticas y dirigentes criticados.

En cuanto a su posicionamiento sobre este tema, Puerta definió: “Estoy en contra de las represas en climas tropicales y subtropicales. Y, fuera de esta zona, depende de qué tipo de represas se trate. Si es una represa de altura en la cordillera, va a contar con mi apoyo, en la medida que eso no destruya un glaciar. El clima, impide una represa en estas latitudes. Ahora, esto, 30 años atrás no lo sabíamos. (Sin embargo), quedó bien claro que con el diseño del poder político en Argentina, te hacen una represa acá y un cable lleva la energía al sur”, disparó el expresidente, tirando por elevación contra la presidente Cristina Fernández de Kirchner –que proviene de Santa Cruz.