Con casi el 70% de la superficie triguera cosechada, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyecta que la producción nacional alcanzará las 9,5 millones de toneladas, unas dos millones de toneladas menos que la campaña anterior.

Es importante tener en cuenta que el área sembrada con el cereal de invierno (3,6 millones de hectáreas) retrocedió este año un 18%, por las malas condiciones comerciales y la falta de estímulos para un cultivo clave en la rotación.

Los técnicos de la Bolsa porteña, que relevaron lotes durante los últimos días, dicen que pese a la caída del área de sembrada los buenos rendimientos son los que permiten mantener la proyección de cosecha y hay expectativas de que la producción sea algo más alta.

“De concretarse las elevadas expectativas de rendimiento relevadas en el sudeste de Buenos Aires, habría posibilidades de finalizar la campaña con un volumen de producción superior a nuestra actual proyección”, destaca el informe.

Los mayores progresos en la trilla se dieron en el sur de Córdoba, en La Pampa y en la provincia de Buenos Aires. “Comenzó la cosecha en el núcleo triguero del sudeste bonaerense, en donde se están logrando productividades en torno a los 40 quintales por hectárea en los primeros lotes recolectados”, concluye la Bolsa porteña.