La oposición pidió una sesión especial para el martes próximo para intentar voltear el decreto referido a la reestructuración de la deuda.
Por Gabriela Vulcano
Los gobernadores decidieron guardarse la última carta que tenían para conseguir que el Gobierno se siente a negociar la letra del Presupuesto 2025. A diez días de que finalice el período de sesiones ordinarias y sin un acuerdo a la vista, por exclusivo pedido de los mandatarios, la oposición resolvió bajar la sesión de este jueves, en la que se iba a tratar el rechazo del DNU 846 -referido a la reestructuración de la deuda en moneda extranjera- y pedir una nueva para el martes próximo.
Si los bloques de Unión por la Patria, Encuentro Federal y Democracia para Siempre avanzaban con esa discusión la semana anterior o esta, el oficialismo no iba a tener más remedio que apurarse para arribar a algún tipo de consenso que le garantizara la aprobación del proyecto de la "Ley de leyes", que en su articulado también contempla lo fijado en el decreto.
El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, le dio la excusa perfecta a los opositores para dejar en suspenso el tratamiento del DNU que se saltea lo que establece la Ley de Administración Financiera, al plantearles que era preciso solicitar una nueva sesión, a raíz de un malentendido administrativo en el momento en que pospuso el debate la semana pasada.
"No vamos a pedir sesionar para este jueves si no tenemos el número para el quórum y para el rechazo del DNU", dijeron desde la bancada Encuentro Federal, que encabeza Miguel Ángel Pichetto.
El temor a repetir un escenario similar al de la otra vez, cuando la oposición no logró reunir los votos, también está presente en el bloque de Democracia para Siempre, que lidera Pablo Juliano, luego de que los gobernadores hicieron saber que no estaban dispuestos a acompañar la sesión que estaba prevista para este jueves, por temor a que se corten las conversaciones con el Ejecutivo nacional.
Un rechazo al DNU 846 pondría en jaque al gobierno de Javier Milei, que cuenta con esa herramienta para el canje de deuda -sin pasar por el Congreso- y que, de no tenerla, debería acordar sí o sí con la oposición para aprobar el Presupuesto 2025.
Atentos a esa movida, hace diez días, desde la Casa Rosada metieron presión a los mandatarios provinciales para que no se lleve ese debate al recinto. A cambio, les prometieron retomar el tratamiento de la "Ley de leyes", algo que finalmente no cumplieron, luego de suspender la reunión de la comisión de Presupuesto y Hacienda que estaba prevista para comienzos de esta semana.
Aunque la oposición tampoco dará la discusión del DNU 846 mañana, está decidida a seguir mostrando los dientes. Un grupo de diputados de Unión por la Patria, Encuentro Federal y Democracia para Siempre pidieron una sesión para el otro martes, con la anuencia de algunos gobernadores, como Maximiliano Pullaro (UCR) y Carlos Sadir (Jujuy).
El objetivo principal es rechazar el decreto. En simultáneo, solicitarán la prórroga de las sesiones ordinarias, lo que permitiría que el Senado pueda tratar el tema; pero además extendería el tiempo para discutir el Presupuesto.
Si la oposición no consigue este último punto, de poco le servirá lograr el número para voltear el DNU, ya que la Cámara alta no tendría chances de discutirlo hasta marzo próximo, por lo que el mismo continuaría vigente.
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