A pocos días que el intendente Facundo Prades, luego de una reunión con el Ministro del interior Rogelio Frigerio, anunciara que estaba confirmado el traspaso de la obra de la Planta de Ósmosis inversa al Municipio de Caleta Olivia para su culminación en conjunto con la Provincia, extrañamente el gobierno de Santa Cruz presentó un recurso de amparo para pedir la planta, desconociendo aparentemente, las negociaciones que se habían llevado a cabo meses atrás entre la Municipalidad, la Provincia y el ente responsable de las obras hídricas nacionales, ENHOSA. 

Esta actitud de la Provincia de intentar marcar la cancha de manera que pareciera oportunista, se vio reflejada en los medios con las declaraciones del vicegobernador Pablo González quien desconoció públicamente las negociaciones llevadas adelante por el intendente Prades, diciendo que se había presentado este amparo por que no se tenia respuesta alguna desde el gobierno nacional, siendo de público conocimiento que unos días antes ya estaba prácticamente confirmado por el primer mandatario caletense que el traspaso de la obra a la Municipalidad se iba a firmar afines de enero o primeras semanas de febrero, a más tardar. 

En referencia a esto, el vicegobernador desconoció también en las declaraciones a medios capitalinos todas las negociaciones entre el Municipio y la Provincia, creando más confusión al acuerdo y al compromiso que había asumido la provincia con el gobierno nacional y con el municipio local, ya que los fondos del UNIRSE estaban reservados por un acuerdo con la propia gobernadora Alicia Kirchner para la culminación de la planta, por lo que el municipio local no tenía que salir a buscar financiamiento, algo que contradice lo que expresó el propio vicegobernador en los medios.

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Ante esto, lo único que esperan los caletenses, es que éste cortocircuito no entorpezca la entrega de la planta y que la obra se termine, será por ello que los funcionarios locales que hablaron en los medios sobre el tema, prefirieron hacer lo contrario a lo hecho por el vicegobernador, es decir declaraciones cautas y poniendo paños fríos a esta "guerra" absurda que inició la Provincia por una planta que necesita ser terminada con urgencia. 

Recordemos que la Nación se niega a entregar la planta a la Provincia por la sencilla razón que el mismo que maneja servicios públicos en la actualidad, Lucio Tamburo es quien estuvo a cargo del ENOSHA en el gobierno anterior y que está procesado por corrupción por sobreprecios en la obra pública, por lo que nunca pudo ni siquiera participar de reuniones con el ENOHSA debido a que su currículum no ayuda para nada a destrabar la situación. 

Las trabas para culminar la obra parecieran nunca terminarse, porque primero fue Eduardo Costa en su lucha con la Provincia quien parecía no querer que se termine y hoy es el mismo gobierno provincial que entorpece en vez de ayudar a resolver la angustiante situación del agua en la ciudad. Esta actitud de cierto sector del Gobierno Provincial es rara en razón de la excelente relación que el intendente Prades venía teniendo con la Gobernadora.