Por María Belén Robledo

El flamante ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires, Martín Marinucci, convocó y sentó en una mesa de trabajo a los titulares de las principales cámaras que nuclean al transporte de pasajeros, y les puso de manifiesto su intención de ir por un “equilibrio” entre la ganancia de las compañías y los beneficios para los millones de personas que utilizan el servicio a diario.

“Nuestro objetivo es que cada vecina y vecino viaje bien. Entendemos que optimizar el servicio, los recorridos y las comodidades forman parte de una ecuación compleja en la que los empresarios también tienen que estar contenidos”, señaló el funcionario ante los representantes empresarios. 

Junto al subsecretario de Transporte Terrestre, Damián Contreras; y la subsecretaria de Articulación Interjurisdiccional del Transporte, Valeria Arata, Marinucci hizo hincapié en la actualización de la estructura de costos con un nivel de subsidio sostenido. “La idea es buscar un equilibrio que proteja a los usuarios y que permita el desarrollo de la actividad”, sentenció.

En el encuentro, que se llevó adelante en la sede de la cartera en la ciudad de La Plata, el ministro expresó la intención de que sea la Provincia la que empiece a administrar la liquidación de los subsidios, aunque para eso, claro, tiene que haber voluntad de Nación. 

Pocos días atrás, el Ministerio de Economía de la Nación firmó una adenda que permitió a la Provincia dar curso a los fondos que las empresas requerían para funcionar, que tendría vigencia hasta pasada la mitad de año. La intención es que, desde entonces, sea la Provincia la que realice las liquidaciones.

“La Provincia, si bien paga sus subsidios, no los calcula, eso lo hace la Nación. Ponen la plata, pero no se hace cargo del resultado porque el cálculo lo hace otra administración. El ministro nos pidió que le acerquemos información y le dijimos que sí, ya que nosotros nos basamos en información pública y verificable; así que quedamos en hacer mesas técnicas, poner los números de costos y entendemos que, en algún momento, la Provincia se va a hacer cargo del transporte plenamente”, valoró el vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), Luciano Fusaro, en diálogo con Buenos Aires/12 . Esto sería, el cálculo de los costos y la entrega de los subsidios.

Según esta entidad, que periódicamente publica informes sobre la situación del transporte conurbano, el cálculo que realiza la administración nacional quedó desactualizado ya que el boleto mínimo tiene un precio de 371,13 pesos, cuando el precio sin subsidio debería ser de 1.393,9 pesos.

Así, en esta reunión de presentación y puesta en común de los temas de interés de ambos sectores, coincidieron en sentarse “con periodicidad” para “estudiar los números, que ellos los comprueben y luego, dentro de las probabilidades de la Provincia, ver que se puede hacer porque el contexto social es difícil para poder aumentar tarifas”.

“Le transmitimos la extrema gravedad de la situación porque los subsidios están mal calculados, atrasados, hay un atraso tarifario, las empresas tienen menos plata y eso se traduce en coches más viejos, con menos frecuencia y peor servicio que afecta básicamente a su área de influencia, porque la gran mayoría de los usuarios del AMBA, son del conurbano”, agregó el empresario.

Marinucci les transmitió que se trata de “planteos razonables”, por lo que pidió los números, aunque señaló que la cartera va a hacer sus propios estudios. “El ministro es consciente de que agarró un fierro caliente cuando asumió, pero nos dijo que está dispuesto a tomar el desafío y tiene todo el acompañamiento de las cámaras para que sea posible”, dijo Fusaro.

“Los usuarios y la Provincia están en una situación económica difícil, pero el transporte debe mejorar y eso se hace con plata. Entonces hay que armar el rompecabezas. Claro que esto no se va a solucionar de un día al otro, pero nadie tiene esa expectativa”, añadió.

El orden del transporte en el conurbano es una de las prioridades que puso en la lista el funcionario al momento de asumir el cargo, el último 30 de diciembre. Como informó Buenos Aires/12, el Ministerio de Transporte bonaerense presionará por la puesta en funciones de la Agencia Metropolitana del Transporte, un ente creado en 2012 que nuclea a representantes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Provincia de Buenos Aires y el Estado Nacional, pero que nunca llegó a formalizarse.

La Agencia se creó con el fin de llevar adelante la coordinación entre las tres administraciones en relación al transporte en la Ciudad y el Gran Buenos Aires. Entre los objetivos de la Agencia destacan los de poner en marcha una planificación multimodal integrada del transporte público, como así también analizar los datos provistos por el sistema SUBE y coordinar trabajos entre los equipos técnicos de las tres jurisdicciones.