Mientras hasta el miércoles era un hecho que el Concejo tendría los votos suficientes para tratar sobre tablas una virtual interpelación del intendente, la cuestión pareció moderarse ayer a la espera de acciones inminentes.
La sesión comenzó con más de cinco horas de retraso por falta de acuerdo entre los concejales del oficialismo que responden al ministro bonaerense Cristian Breitenstein.
Los ediles Ramiro Villalba y Luis Serra se mostraban a favor de votar la citación de Bevilacqua, mientras que el presidente del cuerpo, Santiago Mandolesi Burgos, Soledad Espina y Gisela Ghigliani pretendían ir por la negativa, cosa que finalmente hicieron.
Durante el mediodía, Espina y Ghigliani habían mantenido un encuentro con Bevilacqua en el cual se plantearon varios aspectos ligados a la gestión municipal, aunque ninguno dejó trascender mayores detalles (ver aparte).
En tanto, Villalba explicó que no participó de esa reunión debido a que “no le interesa dialogar con alguien que no cumple lo que promete”.
Minutos antes de la votación, ya sentados en sus bancas, Ghigliani y Villalba continuaron debatiendo sus posturas, aunque cada uno mantuvo la suya, y de esa forma, los 14 votos reunidos para tratar sobre tablas la citación no resultaron suficientes y el tema quedó postergado para la próxima semana.
¿Renuncias?
Por su parte,los concejales del Frente Renovador manifestaron que durante la tarde del miércoles mantuvieron un encuentro con el jefe comunal en el cual le hicieron algunas críticas con respecto a las decisiones que viene tomando con el caso Daiana.
Como respuesta, explicaron que el propio Bevilacqua les aseguró que a principios de la semana que viene anunciaría un paquete de medidas sobre el arbolado público y ofrecería definiciones con respecto a la suerte de los funcionarios que el lunes pasado fueron interpelados en el recinto ubicado en Sarmiento 12.
Fuentes municipales consultadas confirmaron que se analiza la posibilidad de suspender o alejar por lo menos a dos o tres funcionarios; se supone en los pasillos de Alsina 65 que serían el exdirector de Parques, Marcelo Caramelli, y el titular de la Agencia Urbana, Marcelo Lenzi, mientras que la suerte de un tercero, el secretario de Obras y Servicios Públicos, Rubén Valerio, aún es motivo de análisis.
Pese a la fractura del bloque Frente Para la Victoria-PJ, y a las duras acusaciones lanzadas por el edil oficialista Ricardo Pera a los concejales que responden a Breitenstein, su ausencia pareció disimular este quiebre político.
¿Y con Pera?
Luego de los incidentes ocurridos el lunes pasado entre el secretario general de la Unión Tranviarios del Automotor (UTA) y la abuela de Daiana Herlein, Irma Díaz, la oposición reveló que pretende la remoción de Pera como vicepresidente segundo del cuerpo.
A su vez, se presentó un proyecto para crear una comisión investigadora encargada de evaluar el accionar del edil.
Si bien se lograron los votos necesarios para que sea discutido sobre tablas, finalmente la decisión votada por el cuerpo fue posponer el tratamiento hasta que el edil Ricardo Pera estuviera presente en el recinto la próxima semana.
“Creemos que si bien los hechos protagonizados por Pera son graves, no debemos olvidar el tema de fondo que es la muerte de Daiana Herlein”, dijo Villalba al emitir su opinión, que en ese caso fue idéntica a la de sus compañeras de bancada Espina y Ghigliani.
El martes, los mismos concejales sciolistas calificaron de “imperdonable” aquel accionar, en un comunicado cuyo tenor puso luz sobre la débil o nula unidad que existen en el oficialismo local.
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