En ese contexto, la presidente del Distrito de dicha localidad, Ramona Delma Romero, acompañada de Antonio Duran, Placido Ávila y otros pobladores del lugar expresaron que casi gran parte del trazado del Río del Norte no tiene “ni una gota de agua. Está seco debido a la falta de mantenimiento y las permanentes improvisaciones y el fracaso de las obras públicas del gobierno local y provincial, ya que en los últimos años no ha funcionado”.

Juan Carlos Montiel y Gustavo Ventimiglia indicaron que el tan promocionado Río del Norte, al igual que el fenomenal reservorio de agua construido en San Martín Dos “se hallan secos y colmatados por yuyales de todo tipo y los vecinos que creyeron en la promesa del gobierno y del intendente hoy se encuentran sin el líquido vital, padeciendo las consecuencias de las improvisaciones en las obras públicas relacionadas con el manejo de las aguas del Bañado La Estrella”.

“La obra, consistente en un anillado inmenso de aproximadamente unas casi 20 Hectáreas construido a poco kilómetro de San Martín Dos, se halla totalmente seco.

Obras como las estaciones de bombeo están inutilizables por la falta de agua en los riachosLamentablemente es así debido a la improvisación y dejadez, ya que la obra se hizo en un terreno no adecuado para ello, en un estero que según los viejos pobladores de la zona nunca mantuvo el agua por mucho tiempo porque el terreno absorbe”, expresaron los dirigentes radicales.

Agua poco potable

“Mientras –agregaron- que hemos escuchado decir al Intendente Rivero y otros funcionarios provinciales que con esa obra se solucionaba definitivamente el problema de agua de San Martín Dos, y otras localidades o parajes vecinos.

Sin embargo hoy basta con darse una vuelta por el lugar para observar que nada de ello ha ocurrido ni concretado”.

Los vecinos de esa localidad no tienen agua potable y la única laguna que se halla en el centro del pueblo tiene un poco de agua en estado deplorable, imposible de ser utilizada para el consumo humano ya que toda la basura y zanjas abiertas desembocan allí, de manera que también traen de decenas de kilómetros de algunos campos con represas, lo que agrava la situación general.

“Aún así, esa misma agua es distribuida en la población para reponer los aljibes, o en algunos otros recipientes sin ser tener el tratado necesario y adecuado para su utilización”, contó un vecino que se acercó a la delegación encabezada por los dirigentes.

Finalmente los dirigentes radicales indicaron que “si así va ser la vida de los formoseños con el tan promocionado proyecto estratégico “Formosa 2015”, el hombre nuevo tendrá que ir acostumbrándose a vivir la realidad de la permanente improvisación que representan costos y gastos millonarios en obras públicas de dudosa transparencia para el Estado”.