La Federación Nacional de Productores de Leche (Fedeleche) realizará una reunión de directorio este viernes en Santiago, a fin de revisar los últimos acontecimientos que afectan a los productores del país por la rebaja del precio al productor impuesto por las plantas industriales.

Así lo informó el presidente de la Asociación de Productores Lecheros de Bío Bío (Aproleche), Juan Pablo Aruta, quien dijo que en la reunión de Santiago decidirán la presentación de recursos ante la Fiscalía Nacional Económica o el Tribunal de la Libre Competencia. “Creemos que los antecedentes que tenemos ameritan la intervención de los tribunales por la distorsión que estamos viviendo”, señaló Aruta.

Los productores de leche de Bío Bío y Malleco organizaron en septiembre una asamblea en el frontis de la planta lechera Nestlé, en Los Ángeles, para protestar en contra de la pauta de precios fijada por la industria para la zona en la temporada primavera-verano, que se tradujo en una rebaja en torno a 29 pesos por litro al agricultor a contar de septiembre, al descontarse el pago del denominado bono de invierno.

En la oportunidad, los productores entregaron una carta a los directivos de la planta Nestlé, en la que argumentan su posición y hacen presente su molestia.

“Estamos entrampados en una posición súper complicada, porque esperábamos que nos dieran respuesta a la carta que entregamos y adicionalmente, una respuesta afirmativa a lo que todo el mundo lácteo considera, que el precio al productor suba más allá de los precios de invierno”, manifestó ayer Juan Pablo Aruta, quien encabezó una reunión con el directorio de Aproleche convocado para revisar la delicada situación económica que enfrentan.

En la carta entregada a Nestlé -el principal comprador instalado en Los Ángeles- los productores lecheros solicitaron revertir la baja producida por el término del bono de invierno y un incremento del valor de compra, dadas las nuevas condiciones del mercado en el que el precio internacional de la leche en polvo entera, descremada y de queso está en niveles récord de la historia lechera del mundo.

“Por lo tanto, se ve una estabilidad a largo plazo que hace injustificable la baja del precio aplicada por la industria, en un escenario mucho más favorable de cuando se establecieron los bonos invernales”, afirmó el presidente de Aproleche.

COLUSIÓN DE TRANSNACIONALES

Dijo que los productores ya han recibido las liquidaciones de leche entregada, constatando el pago de 150 pesos por litro y deberían estar recibiendo sobre 0 por litro.”Creemos que el promedio planta al productor en Los Ángeles debería estar sobre los 0, es decir, hay una brecha que está produciendo un deterioro en la condición económica de los productores de leche y a la vez un incremento en el lucro de los ingresos de la industria láctea, en desmedro de nosotros. Yo creo que hay una asimetría tremenda hoy día, injustificada, sobre todo que los antecedentes muestran cómo productores del país que normalmente paga menos que nosotros, como Nueva Zelandia, está pagando casi 300 pesos a sus productores”.

Según Aruta, en Chile existe una concentración a nivel industrial de la industria lechera que definen dos empresas transnacionales, Soprole y Nestlé, las que se coluden para determinar precios al productor, muy bajos. Compran más del 60% de la leche que queda en el país y ellos definen lo que sucede, mientras que la industria pequeña no se mueve tampoco. “Los que pagamos la cuenta somos los productores de leche que no tenemos mayores métodos de presión fuera de manifestar nuestro malestar como lo hemos hecho estos días”, dijo.

“Hoy día no hay ninguna razón - enfatiza- que justifique los precios que estamos recibiendo los productores de leche y los tribunales económicos deberían actuar de oficio, a mi parecer, sin que nosotros tengamos que hacer ninguna investigación y el Estado, cuando detecte estas irregularidades, debería oficiar a las instancias que corresponde”.

Aproleche agrupa a todos los productores de leche de Bío Bío y Malleco Norte, unos 450 productores más unos 300 socios activos, de más de 1.200 que había en esta zona hace una década. El mayor universo son los pequeños en los cuales el daño económico es mucho más grave, dijo Aruta. “Todos los días desaparecen producto de la falta de expectativa y de la mala política de precios que ha establecido el sector industrial”.