La historia posadeña indica que las privatizaciones en todos los gobiernos sólo dejaron renegociaciones permanentes, consolidación de privilegios y ganancias extraordinarias para el sector político de turno y su entorno empresarial.
Daniel Porto, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (Soemp) recordó que “hace 20 años, aproximadamente” se creó la Unión Transitoria de Empresas (UTE) con la finalidad de optimizar el servicio de recolección de residuos en la ciudad capital. Pero su fracaso fue rotundo: “estuvieron sólo unos seis meses” dijo para luego comentar “nos fue re-contra mal. Nos dejaron un tendal de camiones y vehículos en desuso los talleres destruidos y no hubo forma de encontrarle la mano, a lo que ellos pretendían hacer”.
Además, Porto comentó que “jamás me reuní con Joaquín Losada intendente, sí me senté a charlar con él, en el momento de su asunción porque él quería encontrar un plantel que no lo supere la situación”, en referencia a las versiones de que el titular del Soemp había acordado con el Ejecutivo municipal “garantizar la gobernabilidad”. “Nunca firmé nada que me quieran imponer, nadie me va a apretar para que lo haga”, acotó.
Esta política de tercerización y privatización llevada adelante por el intendente Joaquín Losada, propia de los años ´90, cuando se celebró la entrega del servicio de agua potable a una empresa española: Servicios de Aguas de Misiones Sociedad Anónima (SAMSA).
Servicio deficiente donde, a pesar de las décadas transcurridas, miles de posadeños no pueden ejercer el derecho de acceder al vital líquido. En ese sentido, el caso más reciente y resonante se encuentra en el moderno barrio de Itaembé Guazú donde los vecinos se mantienen en pie de guerra ante el pésimo servicio que brinda Samsa. Elevados costos por una deficitaria prestación.
Otro caso fue cuando en 2003 la Provincia vendió a la multinacional chilena Alto Paraná S.A miles de hectáreas. Y nunca se interesó por las consecuencias que afectan hasta hoy a miles de familias pequeñas productoras del norte misionero y que incluso, se apropiaron de miles de hectáreas de selva nativa virgen.
Las privatizaciones de servicios públicos nunca acarrean buenos resultados. Solo traen aparejado endeudamiento (en este caso para el municipio posadeño) y negocios millonarios para unos pocos (incluidos los funcionarios de turno). Además según los especialistas la privatización de los estacionamientos en zonas públicas no dará una solución al caos que existe actualmente en el tránsito capitalino.
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