2020 fue el año en el que gran parte de la población descubrió los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). En un ejercicio marcado por el confinamiento y una pandemia mundial esta medida permitió salvar decenas de miles de empleos ya que tanto grandes como medianas y pequeñas empresas recurrieron a ellos para evitar que parte de la plantilla termine en el paro. Pero pese al éxito inicial, un año después los ERTE han dado síntomas de agotamiento y, aunque aún pueden aprobarse, firmas de relevancia ya han decidido dar un paso más por el efecto del coronavirus, planes de reestructuración ya previstos con anterioridad u otros motivos que han abierto el camino a Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que implicarán cientos de despidos y salidas en la Comunitat Valenciana. Una situación que recuerda a los peores momentos de la crisis económica y que revive fantasmas del pasado con los que nadie se quería reencontrar.

Ford. 630 despidos

La factoría valenciana de Ford, la única de la multinacional en España, aprobará en el corto plazo un ERE que llevará a la salida de 630 de los 7.180 empleados con los que cuenta en la actualidad. Este es uno de los ajustes más importantes que ha tenido lugar en los últimos años y llega apenas un año después de otro que tuvo impacto en 350 trabajadores. En ese momento, las salidas se pudieron cubrir con bajas voluntarias y prejubilaciones pero por la cercanía a ese proceso ahora parece más que difícil que pueda repetirse y se dan por hecho los denominados despidos traumáticos.

La negociación con los sindicatos se preveía muy dura pero el anuncio de que la factoría valenciana producirá un motor híbrido para toda Europa a partir de 2023 ha rebajado la tensión y el proceso avanza poco a poco. Los representantes de los trabajadores quieren evitar el máximo número de despidos pero cada vez se da más por sentado que será muy complicado que no haya ninguno.

El sector de la automoción valenciana agrupado en la Asociación Valenciana de la Industria de la Automoción (Avia) ya ha avisado que este ERE generará un «efecto dominó» que aún están cuantificando. Las primeras previsiones hablan de que por cada empleo perdido en Ford Almussafes se arrastrarán otros tres en la industria auxiliar. De forma paralela, otros proveedores directos como Pilkington, la sociedad especializada en lunas y limpiaparabrisas, ha anunciado sus propios recortes por las malas previsiones. En este caso se prejubilará a una treintena de personas.

El Corte Inglés. 3.292 despidos

El Corte Inglés cerró hace pocas semanas un ERE que afectará a 3.292 personas en toda España, lo que representa un 4% del total de contratados. La medida ha sido emprendida por el impacto que ha tenido la pandemia en las cuentas y las restricciones sanitarias que han limitado el horario de comercios e incluso en algunas autonomías ha llevado al cierre de centros comerciales y grandes almacenes. Además, este período ha coincidido con el auge de las compras por internet y aunque El Corte Inglés ha reforzado su apuesta en este ámbito se ha encontrado una feroz competencia. Aún no hay cifras claras respecto a las consecuencias que tendrá en las ocho instalaciones en la Comunitat Valenciana se esperan en torno a 300 salidas por el peso que representa en el conjunto del negocio.

El próximo 23 de abril se cerrará el plazo para inscribirse de forma voluntaria al ERE y se ha pactado una indemnización equivalente a 33 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades del sueldo bruto. Se desconoce si estos incentivos y otros como la posibilidad de recolocarse en otras firmas que se han emprendido para hacer más atractiva la propuesta serán suficiente para cubrir el cupo o tocará recurrir a despidos forzosos.

Naturgy. 1.000 despidos

Por la magnitud de la medida, el ERE previsto por Naturgy (la antigua Gas Natural) es uno de los más dolorosos ya que prevé un recorte de nada menos que un millar de personas de las 5.300 que tiene en plantilla en España. Este ha sido el último expediente de gran magnitud que ha sido anunciado pero preocupa de forma especial porque las cifras avanzadas representan nada menos que el 18% del total de empleados.

El ajuste aún no ha terminado de negociarse con los sindicatos y aunque, como es habitual, la prioridad es apostar por bajas incentivadas y prejubilaciones, su magnitud lleva a que muchos duden de si va a ser posible. El impacto en la Comunitat Valenciana no está claro por el momento pero debido a su gran extensión se da por sentado que implicará un importante número de salidas.

Perfumerías Douglas. 492 despidos

La multinacional alemana Perfumerías Douglas también ha apostado por un ERE nada más dar comienzo este 2020. La firma que cuenta con seis establecimientos en la Comunitat Valenciana cerrará 82 tiendas en toda España y despedirá a 492 trabajadores en el marco de un plan que afecta a toda Europa.

Esta decisión ha sido muy polémica y ha generado dos jornadas de huelga y un inmenso malestar en toda la plantilla. Aún así, las salidas se han logrado reducir en un centenar respecto a la primera propuesta y se ha salvado una quincena de comercios. El impacto en la autonomía será reducido debido a que el negocio es más limitado que en otras regiones pero se podría llegar a perder algún establecimiento, en especial en la provincia de Alicante.

Coca-Cola y Heineken. 588 salidas

A las factorías dedicadas a la alimentación les ha ido bien este último año pero las centradas en la bebida han visto como la reducción del consumo en bares les ha pasado factura. Este contexto ha acelerado ajustes en firmas de la magnitud de Coca-Cola y Heineken, dos marcas que cuentan con plantas en el municipio de Quart de Poblet.

Coca-Cola ya ha pactado un ERE que llevará a la salida de 360 trabajadores y que se hará mediante recolocaciones, prejubilaciones y bajas incentivadas. En Valencia afectará solo a una quincena de empleados de los 350 de la embotelladora. Por su parte, Heineken (que también produce otros productos como Amstel, Cruzcampo o Ladrón de Manzanas) prejubilará a 228 operarios en 2021 y la medida incluye a un total de 31 personas de la planta de Quart de Poblet.

Caixabank. 7.000 despidos

Aún no está anunciado pero en pocos días será una realidad. Una vez materializada la absorción de Bankia por parte de Caixabank queda pendiente un profundo ajuste en la compañía que implicará la salida de en torno a 7.000 trabajadores del que ya es el primer banco del país. Se da por sentado que la Comunitat Valenciana se llevará más de un 10% de los despidos debido a dos causas. Primero, porque se espera que Bankia (heredera de la antigua Bancaja) se lleve la peor parte del proceso y, segundo, porque 700 de las 6.000 oficinas en todo el país están en una de las tres provincias valencianas.

En el sector bancario llueve sobre mojado porque en los últimos años los despidos y el cierre de sucursales han sido una constante en. Además, el ERE que anunció en 2020 Santander se hará efectivo en el corto plazo ya que esta misma semana la entidad ha confirmado que ha aceptado la salida de nada menos que 1.823 trabajadores aunque se apunta que se llegará a 4.000.