Entre las miles de personas que no quisieron perderse la “misa del rock”, entre los que llegaron una semana antes al acampe del parque Agnesi, de San Martín, y la comunidad ricotera que arribó el mismo sábado del recital del Indio Solari, hubo 2.361 fanáticos que decidieron a vacunarse contra la hepatitis B, en el operativo que organizó el Programa Provincial de Inmunizaciones.

“La idea era aprovechar el evento para llegar a este público de adultos jóvenes que, en general, no son de acudir asiduamente a un médico, para concientizar sobre las consecuencias de contraer la hepatitis B, que en 10 o 15% de los casos puede terminar en cirrosis o cáncer de hígado”, explicó Iris Aguilar, titular del Programa Provincial de Inmunizaciones, quien lideró el operativo.

Con el objetivo de que los fanáticos se llevaran algo de información sobre la enfermedad y las vías de transmisión, el camión sanitario se apostó en el parque Agnesi desde el miércoles hasta el viernes, entregando folletería y calcos a los seguidores que se instalaron en San Martín a la espera del ídolo rockero. Sabiendo que los fanáticos del Indio buscan llevarse siempre un souvenir de cada recital, en el operativo se repartieron 6.000 remeras con el slogan frontal “Hepatitis B, una gran vacuna para una gran enfermedad”, que en el reverso tenía la leyenda: “Yo me vacuné en la misa del indio, Mendoza 2014”.

Sólo el miércoles, en dos horas se vacunaron unos 300 jóvenes que acampaban esperando al ex líder de Los Redondos. A los fanáticos que decidieron vacunarse se les entregó un carnet de vacunación –tipo tarjeta para evitar que lo perdieran–, que tenía el mismo logo que la remera y que los habilita a colocarse la segunda dosis correspondiente en cualquier parte del país, teniendo en cuenta que hasta San Martín llegaron fans de las latitudes más distantes.

“La idea es continuar con este tipo de operativos en actividades así de multitudinarias y a quienes no asistan a estos espectáculos vale recordarles que la vacuna de la hepatitis B está en el calendario oficial desde este año y que pueden recibirla en cualquiera de los 314 vacunatorios públicos”, concluyó Aguilar.

Valga recordar que uno de los peligros mayores de la hepatitis B, es que se considera una enfermedad silenciosa, que mientras se desarrolla provoca un daño progresivo.

►300 vacunas en dos horas Fueron las que se colocaron el miércoles pasado, durante el primer día del operativo del Programa de Inmunizaciones.