Los que votaron en contra (casi todos) coincidieron en que el Ejecutivo debe reordenar los recursos e informar al Legislativo sobre lo que ha sido consultado, en tanto que para el único que votó a favor: Sebastián Solimano, el Presupuesto se debería haber aprobado “como mínimo en general” para darle al intendente la herramienta que necesita para gobernar.

Mucha obra pública

La concejal Bibiana García (FpV) reconoció que “el presupuesto es la herramienta que necesita el Departamento Ejecutivo para realizar su proyecto político y quiero que se apruebe pero no de esta manera”.

Asimismo señaló que “en este presupuesto se repiten partidas que ya estaban asignadas en el 2014 para distintas obras y que no se concretaron” y consideró que “hay una partida enorme destinada a infraestructura y a obra pública mientras que para áreas sensibles, como Salud, Desarrollo Social y agua potable, se destinan partidas menores”.

La concejal dijo tener una mirada política diferente a la del Ejecutivo, más enfocada a lo social y en este sentido pidió un “equilibrio” entre lo que se destina a obra pública y a lo social-comunitario. También consideró que “los municipales no tienen que tener miedo porque el sueldo lo van a cobrar”.

“Hay que reordenar los recursos”, señaló García quien admitió: “Me costó mucho tomar la decisión de no aprobar el presupuesto, pero no se puede dejar de lado lo ideológico y para mí tiene que apuntar más a lo social, en este caso el presupuesto tiene un enfoque neoliberal, más de los años ‘90”.

Otras prioridades

El concejal Juan Pablo Ripamonti (Frente Renovador) sostuvo que “nosotros mantenemos una línea de pensamiento basada en las prioridades que entendemos para Trenque Lauquen que las planteamos en el presupuesto 2014 y que no se cumplieron, que las repetimos en el presupuesto 2015 y que tampoco se tuvieron en cuenta, por lo tanto no acompañamos”.

También criticó el movimiento de partidas a través de decretos que no pasan por el Concejo Deliberante “y nosotros somos el control del Ejecutivo”, dijo.

Para el concejal “es necesario que el Ejecutivo reaccione y podamos trabajar en conjunto para destrabar esto, nosotros queremos aprobar el presupuesto pero no en estas condiciones”.

Según Ripamonti, “Trenque Lauquen tiene un contribuyente que paga sus tasas, lo que sucede es que hay que administrar mejor y ser claros” y consideró que “no hay información sobre diversos temas, el vecino no tiene información sobre a quién contrata y cuánto paga el municipio”.

El voto positivo

Sebastián Solimano (Peronismo Auténtico) fue el único que aprobó el Presupuesto 2015 y en cuanto a la postura adoptada explicó: “Si el presupuesto se ajusta a la Ley de Contabilidad de la provincia de Buenos Aires, a la Ley Orgánica de las Municipalidades y no incurre en tomar endeudamientos por montos excesivos o para fines innecesarios, es decir que está balanceado económicamente en cuanto a los recursos y no presenta gastos dispendiosos dentro de lo que está presupuestado, corresponde aprobarlo como mínimo en general”.

Según el concejal “es la herramienta política que tiene el intendente de turno para llevar adelante la gestión de gobierno, además no se puede estar en desacuerdo con el 100 por ciento del presupuesto, porque hay cosas que son netamente operativas que no hacen a la gestión política del municipio”.

Por consideró que “lo que corresponde es aprobarlo en general y rechazar en particular, los puntos en los que se puede estar en desacuerdo”.

Dijo que es la postura que mantuvo desde el principio a diferencia del resto de los bloques que “estuvieron especulando hasta último momento con este tema”.

Para el edil, “el que debe evaluar si el presupuesto fue acertado o no en la asignación de recursos es el ciudadano cuando le toque votar”.

Ante una consulta sobre el impacto que tuvo en el público presente en la sesión, especialmente trabajadores municipales, Solimano dijo que nadie se le había acercado para plantearle su preocupación en torno al tema y disparó: “Yo no hablo para la tribuna en el Concejo”, frase que generó la reacción del titular del PJ (ver más abajo).

Más de lo mismo

Por su parte el concejal Claudio Figal remarcó en recinto del Concejo Deliberante que “en 2014, a pesar del desacuerdo, su bloque aprobó el presupuesto municipal con el objetivo de no entorpecer la gestión del intendente, pero esperando que los cuestionamientos sirviesen a futuro para mejorar el diálogo entre el HCD y el Ejecutivo, principalmente en lo que respecta al acceso de la información contable de la comuna.

“No pasó nada. Hoy estamos en la misma situación que el año pasado”, sostuvo el ex contador municipal.

Recordó que en el decreto de principios de febrero (el N° 1616/15) se solicitó al intendente información respecto del personal municipal y personal médico del distrito, porque “ya se avizoraban inconvenientes con los médicos de Treinta de Agosto. No hubo ninguna respuesta”.

El concejal explicó también que la desaprobación del ejercicio económico no es impedimento para que el municipio pague los salarios en tiempo y forma y cumpla con los aumentos previstos para el año. Citó el artículo 67 de la Ley Orgánica de las Municipalidades que expresa que “durante el examen de las cuentas, el Concejo estará facultado para compensar excesos producidos en partidas del presupuesto por gastos”.

La desinformación que cuestionan todos los bloques, según Figal, se ve reflejada en la Rendición del Cuentas del 2014, también desaprobada en la sesión del viernes. “Hay más de 40 Decretos con movimientos de partidas, montos en obras que no sabemos si hubo algún tipo de licitación, ni cómo se ejecutaron. Las palmeras del acceso es un ejemplo de ello”, dijo.

n Desde el PJ

El titular del PJ, Diego Fernández cuestionó la decisión de Solimano de votar positivamente y dijo que le llamaron la atención las declaraciones del edil al programa Sin Editar: “Él dice que no habla para la tribuna, me parece que si no hablas en el Concejo Deliberante y hablas en una radio es hablar para la tribuna indirectamente, además es una falta de respeto hacia los demás concejales que hablaron en la sesión, quienes defendieron por qué no votaron a favor del presupuesto municipal”.

Asimismo cuestionó la decisión del edil de “levantar la mano a un presupuesto en el que reina el ajuste como dijo la concejal García, un ajuste encubierto, ya que es un presupuesto que se parece más a un presupuesto de los años ’90, me parece que queda bien sentada la posición política que tiene Solimano, que nada tiene que ver con el Frente para la Victoria, a punto tal que no está haciendo aportes para el Partido Justicialista y ni siquiera está afiliado”.