La discusión por el cierre de la línea A del subte, entre el 12 de enero y el 8 de marzo, llega hoy a la Justicia porteña. La legisladora del Frente para la Victoria María José Lubertino presentará un recurso de amparo para que el Gobierno de la Ciudad no interrumpa el servicio o, como mínimo, acorte los tiempos. También solicitará que se garanticen compensaciones a los comerciantes, en caso de que la línea finalmente quede suspendida, y propondrá la protección patrimonial de los antiguos coches “La Brugeoise”, que serán cambiados por otros nuevos.

En su última aparición pública el presidente de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), Juan Pablo Piccardo, repitió que es necesario cerrar la línea A durante casi dos meses para “el cambio de potencia, alistamiento, prueba de coches y capacitación de guardas y conductores”. Sin embargo, desde la oposición y la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP) aseguraron que no existe razón alguna para interrumpir el servicio tanto tiempo.

En esa línea, Lubertino realizará la presentación ante la Justicia porteña. “Con el cierre de la línea A por tiempo indefinido se está causando grave perjuicio a los derechos de los usuarios de subtes”, señaló Lubertino.

La legisladora porteña explicó a BAE que el objetivo es “solicitar que no se interrumpa la línea A durante 60 días; y que en caso de que lo hicieran, sea por menos tiempo y se proteja a los comerciantes con compensaciones o indemnizaciones”.

Lubertino aclaró que “la medida cautelar no tiene por objeto interrumpir el proceso de recambio de los coches”.

“Tampoco resulta urgente cerrar la línea por motivos técnicos, considerando que es la que ha registrado menos averías e incidentes en sus 99 años de servicio, y la que mayor inversión en seguridad y renovación de infraestructura ha recibido en los últimos siete años”, añadió Lubertino en relación con las obras que realizó el Gobierno nacional.

Para reforzar su postura, la diputada citó la opinión de distintos expertos, entre ellos directivos de Metrovías, el ingeniero Raúl Ávila –inspector de Higiene e Ingeniero Civil de SBASE–, Miguel Bonilla Ruiz –auditor catalán–, Alejandro Nazar Anchorena y Edgardo Kutner –ex presidentes de SBASE–, que “han manifestado que en ningún caso es necesario suspender completamente el servicio de la línea A”.

Lubertino, además, señaló la necesidad de que la Justicia “cite a una audiencia a SBASE, la empresa concesionaria Metrovías, trabajadores y expertos que han opinado sobre el tema”.

Mientras tanto, Metrovías ya informó que “entre el 12 de enero y el 8 de marzo la Línea A, que une las estaciones Plaza de Mayo y Carabobo, permanecerá cerrada como consecuencia de las obras de renovación de la flota”. Y agregó: “El objetivo de los trabajos es el de reemplazar los coches La Brugeoise por las nuevas unidades fabricadas por la empresa CNR para prestar servicio en la Línea A”