El tramo final de abril redobló en las provincias la preocupación por los pagos de los sueldos de los empleados estatales, conocidos los alarmantes datos que certifican la caída de la recaudación, tanto de tributos locales como de los impuestos nacionales que se coparticipan.

Los envíos de la Casa Rosada, que completarán $60.000 millones en Aportes del Tesoro (ATN) y un monto equivalente en préstamos vía Fondo Fiduciario, dieron oxígeno a los gobernadores, pero no alcanzan para compensar las pérdidas. La situación se agrava en los distritos petroleros, ya que la caída del precio internacional y la paralización de la actividad por el desplome del mercado interno tiene un impacto extra en las regalías.

“La caída de los ingresos en Neuquén de abril y la proyectada a mayo representa un mes de salarios de los agentes provinciales”, mencionó ayer un informe del distrito de Omar Gutiérrez (MPN), que refleja que de los $12.500 millones recaudados en total en febrero (incluidos ATN, impuestos provinciales y nacionales) bajó a $12.000 en marzo, a $8.800 en abril y proyectan $7.500 para mayo. En esa línea, la ministra de Gobierno de Neuquén, Vanina Merlo, aseguró que el pago de haberes de abril será “todo un desafío”. La funcionaria aseguró que están evaluando “infinidad de hipótesis” y que los gremios “no son ajenos”, en declaraciones al medio regional Río Negro.

Las luces de alertas no son nuevas; ya varios distritos habían mencionado las dificultades para hacer frente a gastos corrientes. Santa Fe y Códoba, gobernadas por los peronistas Omar Perotti y Juan Schiaretti, hicieron referencias a los problemas de recaudación que podrían afectar el cronograma de pagos al plantel de estatales. En La Rioja, el gobernador Ricardo Quintela también manifestó su preocupación ante la necesidad de juntar el monto para el pago de haberes.

Asimismo, la administración de Mariano Arcioni en Chubut, con problemas para acreditar salarios anteriores al aislamiento obligatorio que generó la pandemia del coronavirus, observa dificultades para cumplir con los compromisos con los trabajadores del sector público. De hecho, recién ayer Chubut completó los salarios de febrero a la totalidad de los empleados.

Un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) determinó que entre el 1 y el 19 de abril la recaudación tributaria nacional bajó un 13% en términos reales, y la recaudación provincial cayó un 6,5% real interanual.

Varios distritos consutados por este medio mencionaron, con palabras casi idénticas, que el pago de sueldos está garantizado “por ahora”. Y los gobernadores que aseguran los depósitos tampoco dejan de mostrar pesar el recorte de los ingresos. En ese sentido, el mandatario de Entre Ríos, el justicialista Gustavo Bordet, sostuvo que la provincia puede “garantizar el pago de sueldos, con mucho esfuerzo”, pero remarcó que la recaudación “cayó y obliga a repensar un nuevo modo de trabajar”.

En ese sentido, indicó que “no se va a emitir cuasi moneda bajo ningún punto de vista” ya que dispone “de otras fuentes de financiamiento” gracias “al acompañamiento del Gobierno nacional”.

El radical jujeño Gerardo Morales advirtió por su parte que su provincia “está en la parrilla” por la pérdida de recursos fiscales. “Le pasé al ministro de Interior (Eduardo de Pedro) la proyección de coparticipación”, debido a “que teníamos la previsión de recaudar $2.800 millones y por lo que vemos no vamos a superar los $2.000 millones”. Y aseguró a medios locales: “Vamos a hacer lo que sea para pagar el neto de sueldos de la administración pública”, porque “no solo es importante por el derecho de los trabajadores, sino desde el punto de vista de la economía de la provincia”.

En la vecina Salta, el ministro de Economía local Roberto Dib Ashur, dijo que hay una “una alta complejidad”. El funcionario de Gustavo Sáenz afirmó que garantizan el pago de sueldos y que el distrito está “utilizando algún método financiero para sostener la caída, que en abril va a estar entre el 40 y el 50%”.