Una característica extra de la interna oficialista bonaerense por la gobernación, es la cobertura de la prensa opositora que, inclemente, no deja de clavar el diente en cualquier dato o alternativa, siempre a partir de una plataforma básica e inamovible: los buenos no existen.
La imagen negativa de Aníbal Fernández, o el desconocimiento de su rival, Julián Domínguez, resaltan y conviven en páginas y portales de información política. Pero el ‘malo entre los malos’ resultó Martín Sabatella, candidato a vice de Aníbal, odiado por el multimedios Clarín, también por algunos intendentes peronistas, cuya fotografía hasta fue quitada de su boleta electoral.
Alquilado, Aníbal está siempre entre dos fuegos: su imagen negativa, nunca informada por debajo del 30 por ciento, y algún portal la elevó hasta el 70, sin ninguna fuente verificable para cualquiera de las mediciones. Por el otro flanco, la amplia cobertura a imputaciones de dirigentes que lo vinculan con la droga (Elisa Carrió y Felipe Solá), también sin ninguna prueba.
Pero su compañero de fórmula lo superó. Sabatella, ex intendente de Morón y actual titular del Afsca, despertó un extemporáneo macartismo en Fernando Espinoza preguntó si entre los presentes había alguien de la Federación Juvenil Comunista. El viejo macartismo del peronismo ortodoxo fue un bocado para la prensa antioficialista.
Obvio, cualquier cosa que sea mala para Sabatella, siempre será buena para Clarín, que lo odia sin contemplaciones desde la época del debate por la Ley de Medios. Pero su objetor ideológico, Espinoza, tampoco se la llevó gratis. Carrió dijo suelta de cuerpo que si gana la interna en La Matanza, también ganará el control del negocio de la droga en ese populoso distrito bonaerense.
Su entrevistadora, María O´Donnell, no repreguntó ni formuló comentario alguno, como si fuera algo natural, parte del paisaje. Y así parece nomás, si se recuerda el clima previo a las presidenciales de 1989, que enfrentaron a Carlos Menem (PJ) y a Eduardo Angeloz (UCR).
Por el entonces Canal 13 estatal, en el programa El galpón de la memoria, auspiciado por la alfonsinista Fundación Plural, Jacobo Timerman hizo la afirmación temeraria: “si gana Menem se le abren las puerta al narcotráfico en la Argentina”.
También el veterano Carlos Kunkel le pasó facturas al moronense, un ex PC. Las boletas propias del 2009, que provocaron la derrota de Néstor Kirchner ante Francisco De Narváez; lo comparó con Julio Cobos e invitó a los peronistas a visitar Morón. "Vaya a Morón que hace 16 años gobierna Sabbatella y fíjese si hay algún funcionario peronista. Hasta barrendero puede llegar, más arriba, no".
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